La CEL indicó que la granja tendrá una capacidad instalada de 30 megavatios (MW) en una primera fase, que servirá para el suministro de 71,000 hogares con un consumo mensual de 100 kilovatios hora (kWh).
Este sería el segundo parque eólico que tendría El Salvador, después de que Ventus echara a andar en 2021 su complejo con 54 MW.
Ventus se construyó con una inversión de $73.23 millones a un plazo de 10 años.
El proyecto da los primeros pasos en firme después de más de una década en agenda. Incluso, Fomilenio I hizo un estudio para determinar la factibilidad de aplicar un asocio público privado (APP) para construir la granja en Metapán.
“Con este proyecto, realizamos un aporte importante a la diversificación de la matriz energética, pues esperamos reducir anualmente 70,000 toneladas de dióxido de carbono a la atmósfera”, añadió la CEL en una publicación en redes sociales, tras una visita de la empresa HDF Energy, interesados en conocer el proyecto.
En noviembre de 2023, el gobierno aseguró que se contaba con los terrenos, además de un presupuesto de $2.3 millones para comenzar a implementar el proyecto. Asimismo, se contemplan $182,000 para el estudio de prefactibilidad.
Inyección de energía
La tecnología eólica, que aprovecha el viento para generar energía, representa un 1.8 % de la capacidad instalada en El Salvador y cubrió un 2 % de la demanda reportada en julio.En 2023, la matriz energética de El Salvador inyectó 7,384.4 gigavatios por hora (GWh), de esta porción un 2.2 % correspondió a la energía eólica, con 167.46 GWh suministrados.
En los primeros siete meses de 2024, Ventus inyectó 81.8 GWh a la red, un 1.8 % de los 4,468.2 GWh distribuidos.
En julio, un 2.05 % de la demanda, que ascendió a 610 GWh, fue suplida por la energía eólica, mientras que los principales puestos los ocuparon la hidroeléctrica y la geotérmica con un 42.74 % y un 20.13 %, respectivamente.