Mossi aseguró que este financiamiento “está muy cómodamente dentro de los límites” que tiene El Salvador para acceder a los recursos del multilateral este 2022. Incluso, señaló que los países pueden adelantar los pagos de capital para aumentar el cupo, como ha hecho Nicaragua.
En la cartera de nuevos créditos se encuentran una línea de $100 millones para la Comisión Ejecutiva Hidroeléctrica del Río Lempa (CEL) y otra de $100 millones para el Fondo de Conservación Vial (Fovil), además de una operación de refuerzo presupuestario por $350 millones.
La última operación que aprobó la Asamblea Legislativa del BCIE correspondía a un préstamo de $200 millones del BCIE para cubrir la brecha por los subsidios a los combustibles; sin embargo, el Ministerio de Hacienda señaló que estos recursos los utilizaría para la compra anticipada de bonos que concluyó la semana pasada.
El presidente del BCIE defendió que el crédito es para reconocer el gasto por los subsidios, pero “es una decisión soberana” de El Salvador cómo utiliza el dinero. “Los préstamos de refuerzo presupuestario son para el tesoro, lo que el Gobierno decida hacer con esos fondos, es asunto de ellos, no del banco”, matizó.
“El riesgo de impago de El Salvador, como lo ve el BCIE, es bajo”, aseveró.
Aumento de capitalización.
La Asamblea de Gobernadores del BCIE, desarrollada la semana pasada en México, acordó que para la próxima reunión ordinaria se presente una propuesta de incrementar la capitalización del banco de $7,000 a $10,000 millones que le permita responder a las nuevas necesidades de la región por la inflación y los ajustes de tasas de interés.“El mundo está cambiando, se acabaron las tasas de interés bajas”, señaló el ejecutivo, al detallar que esta crisis ha ocasionado que los cupones en el banco pasen del 3 % a inicios del año a un 5.5 %.
Aun así, sumó, los préstamos de la institución “siguen siendo una opción de menor costo para los inversionistas”.