El Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE) ha financiado con $1.4 millones a pequeños productores salvadoreños en los últimos nueve meses.

El financiamiento es canalizado por el programa CAMBio II, impulsado a nivel regional por el BCIE con el Fondo Verde para el Clima (GCF), destinado a apoyar las condiciones financieras de las micro, pequeñas y medianas empresas (mipymes). Los recursos incluyen asistencia técnica e incentivos para inversiones de adaptación al cambio climático.

La operación en El Salvador, cuyos recursos han sido canalizados por el Banco Hipotecario, ha apoyado a 19 pequeños empresarios del sector caficultor, en seis departamentos.

Dicho financiamiento ha ayudado a proteger 150 empleos fijos en la zonas rurales y urbanas.

A través de un comunicado, la institución recordó que el sector cafetalero es vulnerable a las altas temperaturas, la variación de los patrones de lluvia y la proliferación de plagas, que han reducida significativamente la productividad de los cultivos y ha afectado los ingresos de las personas dependientes de la actividad.

Por más de dos siglos, la caficultura fue de los principales motores de la economía salvadoreña, pero desde la década de 1990 inició una debacle que se agudizó en la cosecha 2012-2013 por un agresivo ataque de la roya, que arrasó la producción a menos de la mitad en El Salvador.

El Instituto Salvadoreño del Café (ISC) reporta que el área cafetalera supera las 165,205 manzanas. El sector es el principal generador de empleos en la zona rural, con más de 43,000 puestos.