“Somos de las primeras empresas, a nivel nacional, que hemos llegado hasta esos mercados”, reconoció José Roberto Gutiérrez, director de comercialización, al describir que el proceso del primer despacho de la marca tomó desde conocer el idioma, explorar rutas de exportación hasta buscar corresponsalía entre los bancos en la plaza salvadoreña con Marruecos.
Indufoam llegó primero a Sudáfrica a finales de 2021, al extremo meridional africano, una operación que le abrió las puertas a más de 11,000 kilómetros de distancia con Marruecos, al norte del continente.
Para Sudáfrica ha despachado tres pedidos de productos terminados –camas y colchones-, y para Marruecos alistan el segundo que se enviaría a finales del 2022.
“Simmons (Bedding Company) reconoce a Indufoam como uno de los mejores, o quizás el mejor fabricante a nivel mundial, ellos recomiendan para los mercados del exterior que si necesitan productos de la alta gama que se los pidan a El Salvador, así es cómo hemos logrado penetrar en Sudáfrica”, agregó René Toruño, presidente de Indufoam.
Ubicada en Hacienda San Andrés, La Libertad, la planta de Indufoam elabora cada día más de 6,000 artículos para el descanso como camas, colchones, muebles de sala y artículos de almohadas, sábanas, edredones y protectores impermeables.
El 50 % de la producción se queda en el mercado local y el 50 % se exporta al resto de Centroamérica, Colombia, Ecuador, Perú, México, Estados Unidos, República Dominicana, y ahora a Sudáfrica y Marruecos.
El volumen de ventas de la firma salvadoreña, con más de 40 años de experiencia, le volvió a colocar como el mayor exportador del sector de muebles del ranking elaborado por la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI) de 2022.
DEM
Una industria que se sobrepone a la crisis.
Gutiérrez reconoció que la ruptura de la cadena logística y escasez de materia prima afectan la dinámica del sector de muebles, en particular porque la empresa salvadoreña depende de insumos importados para sus procesos de fabricación de camas y colchones.Sin embargo, afianzó el suministro por lo que “no nos hemos visto en la necesidad de suspender operaciones y hemos logrado sortear, incluso, hecho alianzas con nuevos proveedores también durante la pandemia que nos respondieron bien”.
La industria de muebles se vio afectada en 2020 por los cierres del sector comercio y hoteles, un fuerte nicho de demanda. Pero encontró oportunidad cuando millones de personas comenzaron a comprar muebles para acomodar sus actividades de trabajo desde casa.
De esa manera, tras una contracción en las exportaciones en 2020, el sector de muebles registró en 2021 ventas por más de $41.5 millones que equivalen a un repunte del 45.2 % frente al año anterior.
La industria salvadoreña de muebles se ubicó como el tercer proveedor de muebles de Centroamérica en Estados Unidos y ocupa la posición 48 de 190 países que venden a la primera economía del mundo con exportaciones por $28.1 millones al cierre del 2021.