El consumo de pollo ha aumentado un 61 % en las últimas dos décadas, según datos de la Asociación de Avicultores de El Salvador (Aves). La gremial asegura que cada año un salvadoreño consume en promedio 48.3 libras.

Tanto el pollo como el huevo forman parte de la canasta básica alimentaria, ricos en proteínas y de los más asequibles para los salvadoreños. Aves tiene disponible en su página oficial datos sobre el consumo per cápita (por habitante) desde 1962, cuando en promedio una persona consumía unas seis libras anuales.

Solo en los últimos 21 años, según la gremial, el consumo aumentó 18.4 libras anuales al pasar de 29.2 libras en el 2000 a 48.3 en 2021. Uno de los períodos de más demanda de la carne de ave es precisamente durante las fiestas de fin de año, Diario El Mundo contactó a Aves para conocer las perspectivas del sector, pero no respondió a nuestros mensajes.

Un reciente estudio de la Superintendencia de Competencia revela que en el territorio salvadoreño operan 621 granjas comerciales, de las cuales 162 son de engorde (de carne) y 398 de postura (de huevos). La producción de estos campos, señala la investigación publicada en septiembre pasado, es suficiente para abastecer la demanda nacional.

El Salvador tiene importaciones de pollo de carne fresca o congelada, principalmente de Estados Unidos a través de beneficios arancelarios por el CAFTA.

En este renglón, el Banco Central de Reserva (BCR) reporta que en 2021 las importaciones de pechugas, alas y muslos alcanzaron los 13.73 millones de kilogramos, que equivaldrían a unas 30.2 millones de libras que habrían costado $26.4 millones.

Estados Unidos es el principal proveedor con una participación del 84.4 %, aunque también hay importaciones desde Guatemala y Honduras.

Cae el consumo de huevos.

Contrario al repunte en el consumo de la carne de pollo, el de huevos ha caído en las últimas dos décadas.

Aves reporta que, en el 2000, un salvadoreño consumía 199 unidades en promedio, pero para el 2021 cayó a 169, equivalente a una reducción de 30 unidades (un 15 %). La baja es evidente entre los años, por ejemplo, en 2018 eran 186, en 2019 bajó a 181 y para 2020 promedió 176.

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En este renglón, el estudio de Competencia destaca que las granjas autoabastecen el mercado salvadoreño y las importaciones representan apenas el 0.9 % de la producción.

Los salvadoreños prefieren el huevo rojo o marrón porque creen que es más fresco y provee mayores beneficios nutritivos.

Las materias utilizadas para alimentar a las aves registraron incrementos consecutivos desde el 2020, cuando comenzaron los esquemas de confinamiento que distorsionaron las cadenas de suministro. A esto se suma el encarecimiento del crudo, que ocasionó que el precio del huevo y el pollo fuera uno de los que más ha subido dentro de la canasta básica.

Por ejemplo, el Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG) reporta que en diciembre del 2021 la libra de pechuga de pollo costaba $1.38 en el mercado central de San Salvador, pero para este mes ha subido un 26 % y se coloca en $1.75.

3 datos que debes de conocer


1.- Precios
Según el estudio de Competencia, el precio promedio de un cartón de huevo de 15 unidades en los mercados municipales es 58.6 % más barato que en supermercados.

2.- Granjas
En La Libertad se concentra el 21.6 % de las granjas de engorde, seguido de Cuscatlán y San Salvador, con 11.1 %. Cuscatlán tiene el 20.9 % de las granjas de postura.

3.- Consumo
Mientras que el consumo de pollo creció más del 60% en los últimos 21 años, el de huevos cayó un 15%, según datos de Aves.