El Salvador recibió más de $262.6 millones en inversión extranjera directa (IED) neta en el primer semestre de 2023, según estadísticas actualizadas este miércoles por el Banco Central de Reserva (BCR).

Douglas Rodríguez, presidente del BCR, reconoció que la IED es uno de los indicadores más consultados por los usuarios de la información económica, ya que se considera una de las variables más valiosas en generación de empleo y es una fotografía sobre qué tan atractiva es una economía para invertir.

La IED neta es el saldo que queda en la economía después de restar las liquidaciones que hacen las compañías a sus casas matrices. Este indicador cerró en negativo en 2022 por primera vez en una década, con -$99 millones, es decir, que hubo más salidas de capital que ingresos.

Aunque los resultados muestran una recuperación de las cifras de 2022, el saldo de la inversión extranjera se encuentra lejos de los valores registrados en 2021 e incluso previo a la pandemia de covid-19.

De acuerdo con un reporte de la IED de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), publicado en julio pasado, El Salvador fue el único del istmo que registró un saldo negativo en 2022, mientras que Costa Rica lideró la región con más de $3,600 millones.

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Destino de la inversión.

Rodríguez detalló que el sector de la industria fue el principal receptor de estos capitales, con $148.9 millones en el primer semestre y significó una participación de 56.7 %.

Estos capitales se destinaron principalmente para la elaboración de bebidas, con $43.9 millones, seguido de la fabricación de productos minerales no metálicos, con $32.2 millones, y preparación de alimentos, con una inversión de $24.2 millones.

El segundo gran receptor es servicios, con $115.9 millones, un 44.1 % de participación. Esta inversión se distribuyó en $57.4 millones para comunicaciones y $51.7 millones en electricidad.

Las estadísticas del BCR señalan que un 71 % de la inversión extranjera que se recibió en el primer semestre procedió de tres países: España, México y Estados Unidos.

El principal mercado de procedencia es España, con $105.3 millones, de los cuales $70.4 millones se destinaron para industria y $31.5 millones a servicios.

México se colocó con $94.1 millones, con un paquete de $85.1 millones para las empresas de servicios y $9 millones en industria.

Estados Unidos, principal socio comercial y emisor de remesas, se situó en la tercera posición con un saldo de inversión extranjera de $78.7 millones. De estos, $59.3 millones fueron recibidos por empresas de servicios y $26.2 millones para la industria.