La empresa respond.oi, fundada por el salvadoreño Gerardo Salandra, cerró un financiamiento por $7 millones en una rueda de inversión en Asia.

Fundada en 2017 en Malasia, respond.oi es una plataforma de mensajería que integra inteligencia artificial en los canales de comunicación entre las empresas con sus clientes a través de chat, páginas web y correo electrónico.

En su última ronda de inversión, logró acuerdos por $7 millones con negociaciones lideradas por la firma Headline Asia con la participación de AltaIR Capital, Smart Partnership Capital, Sterling Oak Group y Calendula Ventures.

En sus primeras rondas de inversión en 2018, logró un financiamiento de $200,000. Más tarde, en 2019, firmó contratos por $1.8 millones. Desde su creación se centró en los negocios asiáticos, pero el nuevo capital le permitirá incursionar en Europa, Oriente Medio y Centroamérica.

Primeros pasos de un gigante.

Tras culminar los estudios primarios en El Salvador, Salandra se mudó a Alemania donde se abrió camino en el campo de análisis y monitoreo de datos para empresas como IBM, Google y Runtastic, esta última comprada por Adidas.

En 2017 decidió fundar su propia firma junto a Hassan Ahmed, ahora director de tecnología de respond.oi, y Iaroslav Kudritskiy. “Hemos construido una plataforma que permite a las marcas multinacionales desplegar esa estrategia tan innovadora a una escala de un millón de conversaciones al día a través de docenas de equipos”, destacó el salvadoreño.

La firma trabaja con más de 10,000 empresas radicadas en Hong Kong, Singapur, India, Tailandia, Filipinas y Malasia. Algunas de ellas son McDonald’s, Radisson Hotels, Toyota, Subway, Honda, Yoho, Roche, ShareChat y Bigo.

“Hemos creado una infraestructura increíble para dar servicio a estos enormes clientes: procesamos más de 140 millones de mensajes al mes”, aseguró Ahmed, director de tecnología, quien señaló que estos resultados incluso superan al mayor competidor europeo Trengo.

El éxito de la firma ha atraído el interés de gigantes tecnológicos al punto que un competidor de Amazon intentó comprar las operaciones, pero el salvadoreño asegura que declinó la oferta y, en su lugar, se integró a nuevos inversionistas pequeños para no perder la autonomía.

Salandra explicó que la firma se diferencia de sus competidores porque utiliza el “comercio social” para llevar a compradores a las redes del negocio, una estrategia que acelera las decisiones de compra.