En los departamentos de Chalatenango, Cabañas, Morazán, La Unión y San Miguel, el promedio mensual de las remesas familiares superó en febrero pasado al salario mínimo, de acuerdo con el Banco Central de Reserva (BCR).

La institución reporta que el promedio global de las remesas se situó en $349.6 en febrero, el valor más alto registrado hasta la fecha y en medio de gran incertidumbre por la política restrictiva del gobierno de Donald Trump contra la comunidad migrante.

El promedio global representa un 95.7 % del salario mínimo, vigente desde agosto de 2021 en $365 para el sector de comercio, industria y servicios.

Tanto el promedio nacional de remesas como el salario mínimo es superado en Chalatenango, donde se situó en $453.3 en febrero pasado, así como en Cabañas que tuvo $444.4 y Morazán en $410.4.

Por debajo de la cota de los $400 pero aún mayor al salario mínimo, en La Unión, el promedio de remesas es de $374 y en San Miguel de $370.

Según el BCR, estos cinco departamentos recibieron el 25.8 % de los más de $1,406.4 millones acumulados entre enero y febrero, donde San Miguel se ubica como el segundo mayor receptor, con una participación de un 11.3 % y solo es superado por San Salvador con un 19 %.

Chalatenango representa un 5.7 %, Cabañas y Morazán un 4.4 %, respectivamente, y La Unión un 6.9 %.


Promedio de remesas por departamento, a febrero de 2025
  • Chalatenango: $452.3
  • Cabañas: $444.4
  • Morazán: $410.4
  • La Unión: $374
  • San Miguel: $370
  • San Vicente: $353.2
  • Usulután: $338.4
  • Ahuachapán: $342.6
  • Santa Ana: $339.5
  • Cuscatlán: $337.1
  • La Libertad: $335.7
  • San Salvador: $316.8
  • Sonsonate: $317.4
  • La Paz: $314.6


Sostén de las familias salvadoreñas

Las remesas llegan a un 26.8 % de los hogares salvadoreños a nivel nacional, pero en algunos departamentos representan ingresos arriba del 40 % de los ingresos de la población. A pesar de que son colchones para la economía salvadoreña, generan una distorsión ya que los empresarios en el oriente del país, sobre todo el sector agrícola, se ha quejado que no hay mano de obra porque las personas se mantienen con estos ingresos.

Los departamentos con el promedio más alto también coinciden donde se encuentra la población más dependiente de las remesas. De acuerdo con el VII Censo de Población y VI Censo de Vivienda, en La Unión hasta un 50 % de los hogares es remesero, así como un 46.6 % de las familias en Cabañas y un 42.5 % en Chalatenango.

En San Miguel, reciben remesas un 38.8 % de los hogares y en Morazán un 37.5 %.