La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID) lanzaron este viernes un proyecto para detectar y responder ante enfermedades relacionadas a la sanidad animal.

El proyecto -denominado fortalecimiento de la preparación y la vigilancia de la salud animal en El Salvador, centrado en enfermedades transfronterizas, zoonosis y resistencia a los antimicrobianos (RAM)- pretende evitar que situaciones como el virus de covid-19 se vuelva a repetir, al hacer hincapié en la alerta temprana.

Este programa es parte del Centro de Emergencia para la Lucha contra las Enfermedades Transfronterizas de los Animales (ECTAD), una iniciativa que fue lanzada hace 20 años con el apoyo de USAID y que ya tiene presencia en 40 países en el mundo.

El representante de la FAO en El Salvador, Diego Recalde, explicó que esta iniciativa ya se replica en Honduras y Guatemala.

Recalde señaló que es necesario que en los países se impulsen alertas tempranas, mejorar los laboratorios, capacitación del personal veterinario en el área de agricultura, así como en la parte de salud humana.

“(Es necesario) estar preparados para abordar mejor, controlar esas estructuras y amenazas que se puedan generar de las enfermedades zoonóticas”, dijo el vocero de la FAO.

El proyecto es apoyado técnicamente por la FAO y ya se ejecuta en Honduras y Guatemala.  /CORTESÍA
El proyecto es apoyado técnicamente por la FAO y ya se ejecuta en Honduras y Guatemala. /CORTESÍA



Iván Bethancourt, director general de Ganadería, indicó que con esta iniciativa se facilitará la formación de capacidades del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), así como del Centro Nacional de Tecnología Agropecuaria y Forestal (Centa).

La inversión anual del programa inicia con $1 millón, pero según el director de USAID en El Salvador, Christopher Cushing, durante la ejecución del programa se han acumulado $250 millones a escala mundial de financiamiento.

Cushing aseguró que se busca seguir expandiendo el programa en el resto de países de la región porque los problemas “no conocen fronteras”.

ECTAD inició en noviembre de 2023 y, según la especialista en bioveterinaria de la FAO en El Salvador, Karen Sermeño, actualmente esperan concluir la conformación del equipo técnico y el coordinador que liderará el proyecto.

“Lo que queremos es fortalecer los equipos de respuestas del Ministerio de Agricultura, el Ministerio de Medio Ambiente, así como Salud, a trabajar de manera articulada y que esto sea en beneficio del país”, indicó Sermeño.

La FAO busca también identificar las brechas en el área de sanidad animal para abordarlas.


Enfermedades

Sermeño señaló que a nivel regional se han detectado casos de influenza aviar, de gusano barrenador y la peste porcina africana.

Indicó que, aunque actualmente El Salvador no ha confirmado ninguna de estas enfermedades, el país se mantiene en alerta.

La especialista en bioveterinaria dijo que el impacto de mantener una sanidad animal positiva beneficia además en la salud pública, el medio ambiente, la academia y los productores salvadoreños.

El programa busca coordinar esfuerzos entre las autoridades nacionales y trabajar con entidades como la FAO, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y la Organización Panamericana de la Salud (OPS), así como el Organismo Internacional Regional de Sanidad Agropecuaria (OIRSA) y la Organización Mundial de Sanidad Animal (OMSA).