Estos bonos, emitidos inicialmente por $800 millones, se incluyeron en la primera oferta de compra de deuda anticipada, lanzada por la Administración de Nayib Bukele en septiembre de 2022. Según el Gobierno, lograron acuerdos por $432.5 millones, por lo que el saldo pendiente es de $367.5 millones.
Las compras anticipadas de bonos se pagaron en parte con el intercambio de 275 millones de Derechos Especiales de Giro (DEG), del FMI, más un préstamo del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).
Para los próximos 30 años, el Gobierno tiene pendiente nueve emisiones de bonos, incluyendo la de 2025.
La última está programada junio de 2052, por $1,000 millones. Esta deuda no incluye los compromisos de corto plazo, que según el Ministerio de Hacienda, a noviembre del 2022, sumaban $2,630.1 millones.
De estos, $1,316.6 millones correspondían Letras del Tesoro (Letes) y $1,313.5 millones a Certificados del Tesoro (Cetes).
Hacienda reporta que el 40 % de la deuda pública debe pagarse entre los próximos 11 y 20 años. Economistas han mencionado la posibilidad de una renegociación.