Tras un exponencial crecimiento de los ingresos tributarios este año en más de 15 %, para el próximo ejercicio fiscal se espera que el dinamismo se desacelere y regrese a tasas similares a las vistas antes de la pandemia, según el anteproyecto del presupuesto de la nación de 2023.

El Ministerio de Hacienda estima que los ingresos tributarios para el ejercicio fiscal 2023 superen los $6,327 millones, unos $178.9 millones (2.9 %) adicionales a los $6,148.2 millones estimados en el presupuesto votado de 2022.

Los ingresos tributarios, un reflejo de la dinámica económica, son la principal fuente de financiamiento del presupuesto y para el próximo año representarán el 71.1 % de los recursos con los que espera contar la administración de Nayib Bukele.

Tras el desplome en 2020 por los confinamientos, los ingresos tributarios experimentaron un fuerte repunte en 2021 y se mantienen en 2022 con un crecimiento interanual del 15.6 % a septiembre pasado, al sumar $5,100.3 millones. Incluso, Hacienda reporta que lo captado por las arcas del Estado al noveno mes ya superó a los resultados de 2019, el último año considerado “normal” antes de la pandemia.

Hacienda explica en el anteproyecto del presupuesto, publicado el viernes por la Asamblea Legislativa, que la estimación de los ingresos tributarios se ha establecido sobre la base de la recaudación de 2022 y el escenario económico de 2023, que según estimaciones del Fondo Monetario Internacional (FMI) rondará apenas un 1.7 %.

Incluso, cuando el ministro de Hacienda, Alejandro Zelaya, presentó el anteproyecto en septiembre pasado reconoció un entorno “de crisis global” porque “el mundo no sabe lo que va a pasar con el mercado financiero internacional” ni “con la cadena de suministros”.

“Además, se han considerado los planes de fiscalización, la aplicación de medidas administrativas y la continuidad de los planes de antievasión y anticontrabando, orientados a promover el cumplimiento de la normativa tributario”, señala Hacienda en el proyecto.

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IVA, el principal impuesto, se contraerá.

El Ministerio de Hacienda prevé que los ingresos por el Impuesto al Valor Agregado (IVA), cargado al consumo, se contraigan en 2.6 % para el próximo ejercicio fiscal.

La institución espera recibir unos $2,950.3 millones, los cuales serían $80.2 millones por debajo de los $3,030.6 millones previstos en el presupuesto de 2022. A pesar de la caída, el IVA será la principal fuente de ingresos al fisco salvadoreño con una participación del 46.6 %.

Mientras tanto, el Impuesto sobre la Renta (ISR) aportará 43.8 %, un gravamen que se carga a los ingresos de los asalariados y empresas. De este tributo, Hacienda espera que el fisco recaude $2,769.9 millones, con un crecimiento de $238.8 millones (un 9.4 %) a lo previsto para este año fiscal por $2,531.1 millones.

También los impuestos a los productos específicos -como al tabaco o alcohol- sufrirán una caída del 9.2 %, pues Hacienda espera captar unos $188.5 millones, que serían $19.1 millones menos que los $207.6 millones previstos para el cierre del 2022.

En tanto, los impuestos a la importación y sobre la transferencia de bienes raíces crecerán 10.6 % y 9.1 %, respectivamente.