A través del sitio web, la CWA explica que la iniciativa pretende recoger información sobre la ubicación de centros de llamadas (conocidos comúnmente como call centers), para así ofrecerles la oportunidad de conectarlos en una sede en Estados Unidos. La iniciativa fue introducida, el pasado 2 de marzo, por el senador Bob Casey, con su copatrocinador el senador Sherrod Brown, Claire McCaskill, y por la Cámara de Representantes asistió el republicano David McKinley y el demócrata Gene Green.
Esta noción va en línea con la política en materia de comercio exterior apoyadas por el presidente Donald Trump, respecto a evitar la “fuga de inversiones” y, así, reducir el detrimento del empleo en el mercado estadounidense.
El proyecto propone que las empresas estadounidenses que adquieran el servicio de tercerización para atención al cliente en mercados externos, no tengan acceso a subvenciones y préstamos federales provenientes de contribuyentes activos en Estados Unidos.
También, la CWA explica que el proyecto obligaría a las empresas a informar a los usuarios que está siendo atendido por un centro de llamadas fuera de Estados Unidos, y que si por lo tanto desea que se le traslade a un operador que funcione dentro de Estados Unidos.
Incluso, la CWA afirma haber entablado una teleconferencia con el senador Gene Green quien manifestó, según cita la asociación, que “debemos hacer todo lo posible para proteger los empleos y los consumidores estadounidenses, para garantizar que los estadounidenses tengan acceso a buenos empleos que proporcionen salarios y beneficios dignos”.
En El Salvador, los cuatro centros de llamadas de capital estadounidense facturaron $80 millones, según las declaraciones tributarias de 2015.
Diario El Mundo intentó obtener reacciones de la Cámara Americana de Comercio de El Salvador (Amcham), y manifestaron que por el momento estudiarían la propuesta previo a compartir declaraciones e indicar el impacto en la economía de lograr remover los centros de llamadas activos en el país.
¿Qué propone la ley?
Sin beneficios
El proyecto propone que las empresas que adquieran servicios terciario no tengan acceso a subvenciones y préstamos federales provenientes de los contribuyentes de Estados Unidos.
Notificar
Se informaría al cliente, durante una llamada, que es atendido por un centro de llamadas fuera de Estados Unidos, para que éste elija si quiere ser trasladado a una operadora estadounidense.
$80 Millones
Cuatro centros de llamadas de capital estadounidense facturaron cerca de $80 millones durante 2015.
5 Firmas
La medida fue presentada con el apoyo de senadores estadounidenses y copatrocinador el pasado 2 de marzo.