La canasta básica alimentaria (CBA) urbana cerró en diciembre pasado en $257.06, su tercer precio más alto en dos décadas, de acuerdo con los registros de la Oficina Nacional de Estadísticas y Censos (Onec).

La última actualización de la CBA revela que la canasta alimentaria urbana subió en $1.46 en diciembre pasado, un mes caracterizado por un fuerte incremento en precio de alimentos tradicionales para la época de Navidad y fin de año.

Con este valor, la canasta urbana es la tercera más cara desde que la Onec tiene registros, a partir de 2001, solo superada por los $257.81 que costó en octubre y los $257.60 de septiembre de 2023.

En las últimas dos décadas, el costo de los alimentos se ha duplicado, pues en diciembre de 2001 la gesta alimentaria en la zona urbana costaba $128.40.

En la zona rural, en tanto, la canasta básica alimentaria registró una disminución de $3.3 en diciembre y cerró en $186.07. La Onec documenta que la CBA mostró una reducción lenta desde que alcanzó su pico máximo en julio de 2023, cuando superó $193.98.

Carnes y huevos, los más caros.

La CBA reúne un grupo de alimentos fundamentales para el desarrollo de una persona. Además, es utilizada para medir la pobreza monetaria, calculada a partir de cuántos hogares pueden adquirir una canasta simple (pobreza extrema) y una canasta ampliada (pobreza relativa).

La Onec publica el costo de cada ración de alimentos para una persona. La gesta varía entre la zona urbana y la zona rural, pero los resultados de diciembre muestran que los alimentos que más registraron un incremento corresponden a los huevos y las carnes.

En diciembre, en la zona urbana hubo un incremento en las raciones de carnes que pasaron de $0.496 a $0.497, así como de huevos que subió de $0.109 a $0.113.

La leche fluida subió de $0.113 a $0.116; las verduras de $0.235 a $0.252; y el azúcar de $0.078 a $0.079.

Por otro lado, la CBA urbana mostró una reducción en la ración de pan francés, tortillas, arroz, grasas, frutas y frijoles.

En la zona rural, la Onec registra que también subió la ración de carnes, huevos, leche fluida y azúcar. La baja en promedio de la canasta básica fue gracias a una reducción en tortillas y grasas, frijoles.