La costarricense Gisela Sánchez tomó este martes oficialmente la juramentación como la nueva presidenta del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), la primera mujer en dirigir la institución y quien promete una transformación profunda.

Sánchez, seleccionada entre más de 200 profesionales de la región, lleva a Costa Rica a la presidencia del BCIE después de 30 años de la última administración. La economista tomó posesión en una ceremonia realizada en San José, acompañada del presidente costarricense, Rodrigo Chaves, y altos funcionarios del Ejecutivo, Legislativo y Corte Suprema.

La costarricense reconoció que su llegada al banco es un punto de inflexión y marca el inicio de una “transformación profunda y positiva dentro del BCIE”.

“Es momento de enfocarnos en la ruta estratégica que nos permita convertir al BCIE en un catalizador del desarrollo sostenible. Esta ruta estará marcada siempre por ética, transparencia y excelencia”.

Gisela Sánchez
Nueva presidenta del BCIE


La elección de Sánchez estuvo marcada por constante polémica por la ruidosa salida de Dante Mossi, quien fue catalogado como el “banquero de la dictadura” por su apoyo a Daniel Ortega. En sus últimos días de gestión, salió en la prensa hondureña contando cómo algunos países miembros no acompañaron su reelección -incluyendo Costa Rica- y fue relegado de su cargo antes de su salida.

“Nos encontramos reunidos para celebrar no solo el cambio de la presidencia del banco, sino más bien estamos celebrando el inicio de cambio de visión”, dijo Erwen Masis, director por Costa Rica ante el BCIE.

Por su parte, el presidente Chaves destacó el rol de una mujer al frente del multilateral que enfrenta desafíos internos, en un contexto donde hay una ruptura en el multilateralismo.

Transformación.

Sánchez se comprometió a realizar una transformación para convertir al banco es un catalizador de recursos, pero con enfoque social y desarrollo sostenible. “Nuestro objetivo es que el BCIE se convierta en un referente por ofrecer soluciones integrales para los países que sirve”, añadió.

El BCIE, fundado en 1963, se convirtió en el principal financista para los gobiernos de la región. En las últimas dos décadas, un 50 % del financiamiento provino de operaciones de este multilateral.

La propuesta de trabajo de Sánchez incluye un objetivo para convertir a Centroamérica en una región más competitiva y digital, así como mejorar aspectos sociales en temas de nutrición, vivienda, conectividad y acceso.

La nueva presidenta del BCIE también se comprometió a potenciar el capital humano, sobre todo en los segmentos vulnerables como las mujeres o comunidades indígenas. Además, de promover la inclusión financiera, equidad de género y la descarbonización de Centroamérica.

“Debemos enfocarnos en la solidez financiera de la institución. En ser lo más eficiente posible en el uso de los recursos del banco y en el control integral de riesgos y cumplimiento de prácticas”, señaló Sánchez, quien insistió que los proyectos de financiamiento se realizarán con rigor técnico.