Luego de cinco años de iniciados los trabajos de remodelación en la Puerta del Diablo, en Panchimalco, la ministra de Turismo, Morena Valdez, aseguró este lunes que los avances de construcción alcanzan en la actualidad un 90 %.

“Nosotros estamos a un 90 % de avances en la Puerta del Diablo, esperamos poder tener esa inauguración en los próximos meses y poder devolverlo a la población”, indicó la ministra.

El proceso de remodelación ha tenido varios inconvenientes de carácter ambiental desde sus inicios, cuando el Juzgado Ambiental de Santa Tecla emitió en diciembre de 2018 una resolución ante la denuncia social de los habitantes que aseguraban que el Instituto Salvadoreño de Turismo (Istu) no contaba con los permisos ambientales.

Para 2019, el Instituto aseguró que ya contaba con los permisos y que la remodelación culminaría en cinco meses.

Tres años después, en diciembre de 2022, el Istu aseguró que la Puerta del Diablo se abriría a mediados de 2023. No obstante, Valdez no se comprometió ayer con una fecha de inauguración.

El Mitur señaló que son más de $2 millones los que se han destinado para esta inversión.

La Puerta del Diablo forma parte de uno de los centros turísticos más populares en El Salvador, pues, desde este punto, se puede apreciar la capital, el lago de Ilopango, el volcán de San Miguel y el océano Pacífico.

Aumento de turistas.

Hasta agosto pasado se registraron 2.2 millones de visitantes en El Salvador, los cuales dejaron una derrama económica de $2,100 millones, un incremento del 35 % contra los mismos datos de 2022.

Valdez indicó que la mayoría de los turistas llegaron al país por vía aérea, que se quedan de nueve a 12 días y con un gasto promedio de $195 a $259 diarios.

“Estamos teniendo un incremento de nuestros hermanos guatemaltecos y hondureños, y un crecimiento en cuanto a ingresos y visitantes de otros países de Sudamérica y Europa”, indicó Valdez.

El Mitur prevé que el 2023 cierre con 2.9 millones de visitantes.