Las microempresas contribuyeron al equivalente de un 42.9 % del producto interno bruto (PIB) en El Salvador en los últimos ocho años, según una investigación presentada por la Fundación Salvadoreña de Apoyo Integral (Fusai).

El director de Fusai, Luis Castillo, aseguró este jueves que este hallazgo confirma que las microempresas se han convertido en la “columna vertebral” de la economía salvadoreña, con especial enfoque en aquellos sectores de escasos recursos.

“El PIB mide el valor de los servicios y bienes producidos en un país, encontramos que en los últimos años en promedio la participación de las micro empresas representa un 42 % en todo el PIB del país”, indicó Castillo durante la presentación del informe “Estado de la Mype 2024. La otra cara de la Economía”.


Variación anual

Los datos presentados por el investigador y director de la Facultad Latinoamericana de Ciencias Sociales (Flacso) en El Salvador, William Pleites, revelaron que la contribución porcentual de las microempresas al PIB de El Salvador rondó entre un 41 % a un 47 % entre 2016 y 2021.

Para 2022, la contribución cayó a un 37.9 % y el año pasado cerró con un 36.3 %. En 2023 la inflación impactó directamente en el aporte que las microempresas generan al país.

Según la fundación, la inflación en los alimentos afectó a los empresarios, limitando la reducción de la pobreza.

El presidente de la Comisión Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (Conamype), Paul Steiner, aseveró que parte de estas contribuciones tienden a no incluir a todo el sector informal, y estima que solo en ese grupo se concentra otros $15,000 millones que no son percibidos en las estadísticas oficiales.

El país cambiaría, según el funcionario, si las empresas estuvieran formalizadas.

El análisis también estima que las microempresas aportan un 34.9 % del ingreso nacional bruto, por encima de un 20.4 % de la contribución de las remesas, de un 27.3 % de las medianas y grandes empresas, y de un 17.4 % de los gastos de consumo e inversión del gobierno.

Pleites recordó que las microempresas contribuyen con un 70 % del empleo del país. Además, un 60 % estarían lideradas por mujeres. /Jaqueline Villeda
Pleites recordó que las microempresas contribuyen con un 70 % del empleo del país. Además, un 60 % estarían lideradas por mujeres. /Jaqueline Villeda


Fusai señala que, pese a que el crecimiento en El Salvador ha sido sostenido sobre un 3 %, esta alza no ha beneficiado “plenamente” al sector.

“Entre 2021 y 2023, solo el 25 % de los microempresarios reportaron incrementos consistentes en ventas, empleo e inversión, lo que indica que solo una cuarta parte se ha beneficiado de la reactivación económica", indicó la investigación.

El director de Fusai indicó que, aunque la mayoría de los empresarios externaron su positivismo con la situación, uno de cada tres microempresas aseguró tener dificultades financiera, un incremento a la competencia, así como problemas de endeudamiento y de competencia.


Atención al sector

Fusai destacó la necesidad de apoyo al sector y de subsidios, que permitan la reactivación de los emprendimientos y volverse sujetos a créditos.

Castillo informó que, en atención a las necesidades del sector, el proyecto de créditos que estableció Fusai desde 1990 se transformó en el Banco Integral tras la aprobación de las autoridades para fungir como tal a partir de este mes.

“Consolida nuestra vocación a las mypes, al ser un banco mype es un banco de nicho, no es un banco corporativo, y ¿por qué nos hacemos banco? Porque hemos entendido que los empresarios necesitan que los acompañemos y necesitan no solo servicios financieros sino que bancarios”, añadió el vocero de Fusai.

La fundación estima que un 76 % de las empresas en El Salvador operan en la informalidad, mientras que un 24 % se identifican como semiformales, las cuales cumplen solo “obligaciones legales”.

Además, un 49 % son empresas de subsistencia, cerca de 450,000 negocios, y el resto pertenecen al resto de sectores como acumulación o expansión, los cuales tienen más capacidades de ahorro o inversión.

Buena parte de las microempresas tienden a financiar parte de su negocio con remesas. Un 44.8 % de los empresarios que recibe remesas dijo que las destina para fortalecer su negocio.

Un 40 % de las empresas se financian de sus propios ahorros o de familiares, y más de 60 % requieren financiamiento.