El sistema bancario salvadoreño se mantiene sólido a pesar de las presiones inflacionarias, impulsado principalmente por el sector de electricidad y construcción.

Aunque ambos sectores tienen una participación menor dentro de la cartera de préstamos brutos de todo el sistema financiero, de 5.5 % la construcción y 4.4 % electricidad, son las dos industrias que más crecieron a agosto pasado, según el último informe de la Asociación Bancaria Salvadoreña (Abansa).

En el caso del sector de electricidad, la cartera de préstamos llegó a $668 millones a agosto, $232.5 millones adicionales a los resultados en el mismo período del 2021 y significó un crecimiento interanual de 53.4 %.

Mientras que la industria de la construcción, uno de los principales motores de la economía salvadoreña, demandó $119 millones más en préstamos que hace un año y alcanzó una cartera de $829.4 millones, un 16.7 % de crecimiento interanual respecto al 2021.

Según Abansa, las carteras de préstamos de todos los sectores de la economía crecen. El consumo, principal demandante de los recursos del sistema financiero en un 32 %, experimentó una variación positiva del 6.8 % al cerrar en agosto con un saldo de $4,983.2 millones, unos $315.6 millones más que hace un año.

La cartera de préstamos de vivienda tuvo el crecimiento más débil en 2.8 %, pero es el segundo rubro de mayor participación en el sistema con un saldo de $2,626.7 millones a agosto.

El comercio creció 13.7 %, la industria manufacturera un 5.8 %, al igual que el rubro de servicios.

DEM
DEM

Un pilar de solidez en la crisis.

Abansa destaca que los bancos inyectaron $1,301.2 millones más a la economía salvadoreña que hace un año, pues la cartera de créditos llegó a $15,198.9 millones y significó un crecimiento interanual del 9.4 %.

Esta cartera es liderada por Bancoagrícola que tiene una participación del 25 %, seguido de Banco Cuscatlán con una cuota del 17.8 % y BAC Credomatic con un 14.6 %.

La cartera de depósitos, por su lado, creció $773.9 millones (un 5.1 %) frente al mismo mes de 2021, pero Abansa destaca una desaceleración en los últimos meses: después de alcanzar los $16,091.2 millones en julio, para el siguiente mes se redujo en $31.6 millones y cerró en $16,059.6 millones en agosto.

Entretanto, Abansa señala como positivo que la cartera de créditos vencidos disminuyó $42.3 millones, un -12.4 %, y cerró en $298.7 millones. La mora bancaria representó el 2 % y los bancos tienen una cobertura de reservas del 148.3 %.