“En el primer año de operaciones no cerramos ningún negocio con hermanos lejanos y hoy muy probablemente un 30 % de los negocios son negocios con hermanos lejanos”, puntualizó el director general y cofundador de Porta Real Estate Boutique, William Velasco.
El sector señala que el principal interés se centra en complejos habitacionales o para inversión.
RD Bienes Raíces, una empresa con más de 26 años de experiencia en el mercado inmobiliario, señala que en lo que va de 2023 el incremento en la demanda ha despuntado producto de los niveles de seguridad en los que se encuentra el país.
“Aquellos hermanos lejanos que tuvieron que abandonar su hogar, pudieron ahorrar y generar más ingresos para ahora venir y comprar una casa o construir su propia casa”, señaló la compañía.
La playa y la ciudad son dos sectores que concentran la adquisición de propiedades por parte de los hermanos lejanos, no solo para viviendas, sino para invertir en oficinas, bodegas o establecer apartamentos en renta.
La ola de atracción por las propiedades salvadoreñas en el exterior también es percibida por Porta Real Estate Boutique; sin embargo, el director general de la compañía explicó que muchos posibles compradores no invierten en el país porque desconocen sobre qué proceso seguir o desconfían del mismo.
Velasco señaló que su empresa ofrece asesorías para que los hermanos lejanos faciliten el proceso de compra y conozcan las leyes, además se ofrece información sobre préstamos a los que estos pueden optar con la banca local.
Ambas empresas coinciden en que la mayoría de los salvadoreños en el exterior que compran propiedades se encuentran en un rango de edad entre 40 y 70 años.
Las casas de playa también son un atractivo para los salvadoreños en el exterior. / DEM
¿Qué demandan los compradores locales?
A nivel nacional, la tendencia reportada por los salvadoreños es más específica, pues el sector inmobiliario confirma un incremento de la demanda de proyectos habitacionales y comerciales en la zona costera.Porta Real Estate Boutique señala que muchos inversionistas han comenzado a construir torres de apartamentos frente al mar, una situación que hace algunos años abarcaba a una pequeña porción entre todos los proyectos.
Velasco señala que las ofertas de torres de apartamentos están cambiando su enfoque de la clase media y alta, con precios que ya superan el $1 millón, hasta proyectos verticales accesibles para la clase trabajadora, con precios que rondan entre los $40,000 y $70,000.
Una escasez de casas en el Área Metropolitana de San Salvador (AMSS) es otra de las tendencias que, según Velasco, ha provocado que las propiedades que rondan los $150,000 y $200,000 “no duran ni tres o cuatro semanas en el mercado”.
La paulatina reducción de terrenos para construir habría provocado que la oferta inmobiliaria se mueva poco a poco a zonas como Apopa o Lourdes. Además, los inversionistas están estableciendo cada vez más ciudades fuera de San Salvador y La Libertad.
El vocero de Porta Real Estate Boutique señala que un 60 % a 70 % de las torres de apartamentos nuevos son comprados por inversionistas y solo un 20 % a 30 % son adquiridas para habitar.
Por su parte, las viviendas usadas se adquieren en su mayoría para fines habitacionales, y un 5 % las adquiere para alquilarlas.