La sostenibilidad de las finanzas públicas, junto al aumento de la deuda, son los grandes desafíos que El Salvador posee a mediano plazo, aseguró este jueves un análisis de Grupo Bancolombia, casa matriz de Bancoagrícola.
Las estadísticas de Bancolombia apuntan a que los pronósticos de deuda pública para El Salvador no serán positivos en los próximos años. De hecho, se prevé que 2023 cerró con un endeudamiento de un 74.3 % respecto al Producto Interno Bruto (PIB), una cifra que se mantendrá para 2024, pero que, a partir de 2025, comenzará un proceso al alza.
Aunque no se prevé alcanzar el 90.7 % del nivel de endeudamiento con respecto al PIB, como en 2020, la deuda pública tendrá un lento ascenso que la llevará a abarcar un 79.2 % del PIB para 2028.
“Definitivamente los mensajes que pueda dar el gobierno de Bukele, ahora reelegido, serán bastante importantes de cara a las conversaciones que se han tenido con el FMI”, indicó la directora de Investigaciones Económicas de Bancolombia, Laura Clavijo.
El discurso presidencial también será importante para los inversionistas, según Clavijo.
Por otro lado, la ejecutiva ha recibido reportes desde El Salvador que destacan cómo la dinámica de la seguridad y una mejora en los niveles de inversión extranjera directa (IED) generan un sentimiento de corto plazo “optimista”, el cual, según Clavijo, puede conducir a un mayor crecimiento económico.
Crecimiento.
Las últimas proyecciones trimestrales compartidas por Bancolombia, para los países en donde tienen operaciones activas, señalan que, para este 2024, el país podría registrar un crecimiento del PIB un 1.9 %.La tendencia de crecimiento podría incluso ser superior en 2025 y, desde ese periodo en adelante, se estima un PIB “por encima de un 2 %”.
“Esto va bien en línea y son casi los mismos (pronósticos), ligeramente por debajo de la economía estadounidense, muy en línea con esa perspectiva de desaceleración para Estados Unidos”, explicó Clavijo.
El análisis de Grupo Bancolombia también abarca los niveles de inflación, en donde se destaca que, a pesar de que El Salvador alcanzó altos números en 2022, la inflación anual caerá a 1.9 % en 2024, y descenderá un escalón más para el próximo año, cuando se estima que rondará el 1.8 %.
El nivel de inflación anual para El Salvador en 2024 sería incluso menor que el previsto para Panamá y Guatemala, para los cuales se estima que ronden un 2.2 % y un 3.9 %, respectivamente.
“La inflación mundial viene cediendo, se dice que la parte más difícil en materia de inflación va a ser la de este año”, acotó la ejecutiva.
La directora aseguró que los fenómenos climáticos también se han vuelto un reto para los países, por lo que se debe estar vigilantes.
Bancolombia alertó sobre una desaceleración económica que se vivirá en 2024 en la economía global, el cual implica un alto costo que será necesario para “recuperar el equilibrio”. El análisis plantea este año como uno “histórico”, pues muchos países se encontrarán en un proceso de recorte de tasas de interés.
“Hay tensiones geopolíticas, riesgos climáticos, y la incertidumbre y volatilidad seguirá presente en los mercados, a lo que se suma el ciclo electoral, particularmente en Estados Unidos”, indicó Clavijo.
