El Ministerio de Educación anunciaba el viernes que el nuevo año escolar inicia el próximo 6 de febrero de forma totalmente presencial, una decisión en el rumbo correcto para la vuelta a la normalidad de la vida cotidiana y además, una medida correcta para el aprendizaje.

La Asociación de Colegios Privados de El Salvador revelaba el año pasado que las deficiencias en los estudiantes salvadoreños debido a la pandemia de covid-19 y las metodologías de enseñanza habían dejado una deficiencia de más de 50 % en los aprendizajes. La asociación señalaba que aprendizajes básicos como la lectura, escritura y cálculos matemáticos son algunas de las deficiencias en los estudiantes actuales.

Otros académicos han advertido que es probable que solo el 30 % de los contenidos curriculares se hayan impartido debido a problemas de conectividad, falta de equipo tecnológico, la limitada alfabetización digital en docentes y la falta de empatía de los docentes.

El año pasado, y aún a causa del covid-19, el Ministerio permitió el regreso presencial a las escuelas, sin embargo, también las actividades desde casa a través de la franja educativa de canal 10 y de radio nacional. De igual forma, los estudiantes desarrollaban guías y podían tener sus clases en línea, con las computadoras entregadas por el Gobierno. Pero evidentemente no fue suficiente.

De manera que este año escolar será una oportunidad para que los maestros y estudiantes puedan retomar el camino correcto del aprendizaje y subsanar las deficiencias derivadas de esta situación.