El voto electrónico, que permitirá que los salvadoreños en el exterior puedan ejercer el sufragio para presidente y diputados, aún tiene demasiadas incógnitas y dudas que el Tribunal Supremo Electoral no termina de definir a la espera de Dios sabrá qué.

El voto electrónico remoto está programado para iniciar el 6 de enero de 2024 y a estas alturas del calendario, el Tribunal Supremo Electoral aún no ha definido cuántas personas tiene el registro electoral de salvadoreños en el exterior. Cuando se les pregunta a los magistrados del TSE responden con cálculos o proyecciones pero no queda clara una cifra.

Es decir que a 33 días del inicio del voto electrónico, no hay un registro listo de electores y claro está eso genera dudas, desconfianza, incertidumbre no solo en los partidos políticos opositores o en los medios de comunicación sino también en la propia diáspora que están supuestos a beneficiar. ¿Por qué tanto retraso?

Evidentemente sin registro electoral definido para voto en el exterior no hay garantías de transparencia sobre la pureza de un padrón electoral. Los magistrados no pueden seguir retrasando esta definición tan elemental para un proceso electoral inédito. Si ya fue complicado todo el proceso de contratación de las empresas informáticas tanto para el procesamiento como la auditoría, el TSE no puede seguir sumando dudas.

Cualquier retraso, complicación, incertidumbre o malos resultados de este proceso serán responsabilidad directa de los magistrados, por eso es fundamental que resuelvan de inmediato los temas pendientes sobre el registro de votantes en el exterior.