La inteligencia artificial nos asombra diariamente con sus novedades. Desde sus generadores de texto, sus modelos de lenguaje grande, los programas de manipulación de vídeos e imágenes. Toda una serie de herramientas tecnológicas que parecen sacadas de una película de ciencia ficción, pero no, aquí están con todo y sus riesgos.

El ChatGPT, el generador de textos más popular da mucho de qué hablar en estos días. Pero la empresa fabricante ya emitió un comunicado advirtiendo que el programa “no siempre genera respuestas precisas”. El problema es que ya se está usando hasta para tareas escolares, habrá qué ver cómo lo evalúan los maestros.

Algunos parecen demasiado entusiasmados sobre la inteligencia artificial, otros lo ven con un optimismo precavido. Y como la ciencia ficción, también encarna problemas que se pueden salir del control humano.

Según el profesor Gary Marcus, uno de los expertos en esta materia, “algo increíble está sucediendo en el mundo de la inteligencia artificial, y no es del todo bueno”. A su juicio, el lanzamiento de ChatGPT nos lleva al “momento Jurassic Park” de las máquinas: la posibilidad —como en la película de Steven Spielberg— de que la situación se salga de control.

Según Marcus, “los sistemas de inteligencia artificial que tenemos ahora no están bien controlados. Todavía no es una situación terrible, pero la gente les está dando cada vez más poder. Y no sabemos qué pueden hacer esos sistemas en una situación determinada”.

Y a eso hay que sumarle advertencias como la del músico británico Sting que predijo una “batalla” de los artistas para defender sus obras”. Lo cierto es que hay demasiadas aristas tecnológicas y éticas para evaluar con cautela esta nueva tecnología que tanto nos asombra.