En los últimos meses hemos visto una serie de vídeos de gente que protagoniza hechos de violencia en las calles de nuestro país, motoristas que se enfrentan en plena calle, sujetos que atropellan gente salvajemente y un grupo de jóvenes que le propinan una golpiza a un muchacho en plena vía pública.

Estábamos acostumbrados a esas escenas. A vivir la ley de la selva y que no pasara nada. Entonces la gente parece haber despertado sobre esta problemática, ahora se filma y se denuncian hechos hechos y las autoridades proceden a investigar y capturar a los responsables de esos actos. Eso es positivo.

Si queremos un El Salvador más ordenado, más civilizado, en convivencia armónica y la más mínima consideración hacia nuestros semejantes, es importante corregir estas conductas y evitar que sigan ocurriendo.

Popularmente se dice que muchas de estas conductas suelen venir de motoristas del transporte público pero como hemos visto, ocurre en todos los estratos de la vida cotidiana, por ahí apareció hasta un exdiputado metido en problemas de este tipo. Son conductas inadmisibles en cualquier sociedad. Es violencia social que tiene que terminar.

Después de la inseguridad, el tema del tráfico es una de las mayores preocupaciones que enfrentamos. Incluso en algún momento una famosa aplicación nos puso como el país que peor conducíamos y parte del problema es precisamente esa violencia social, esa agresividad que tanto daño causa. No podemos seguir viviendo en la ley de la selva, esa es una responsabilidad de todos como sociedad.