Las elecciones de “medio término” en Estados Unidos que renuevan la Cámara de Representantes y el Senado norteamericanos han dado un ligero dominio de los republicanos en ambas cámaras, aunque no en la magnitud que se había pronosticado.

Ahora la pregunta que flota en el aire es ¿cómo nos va a impactar en El Salvador y Centroamérica el resultado electoral estadounidense?

Lo primero que hay que analizar es el tema migratorio. Si el presidente Joe Biden con las dos cámaras bajo dominio demócrata no tuvo la voluntad política ni la capacidad de negociar una reforma migratoria, con la oposición republicana controlando el Legislativo, esa posibilidad se aleja cada vez más. Eso puede poner cuesta arriba los esfuerzos de legalización de cientos de miles de salvadoreños y centroamericanos.

También puede traer dificultades en el proceso legal que han emprendido los casi 200 mil salvadoreños beneficiados por el Estatus de Protección Temporal (TPS) y hacer más difícil su permanencia o sus permisos de trabajo.

Lo más acertado de parte de los gobiernos de El Salvador y el resto de Centroamérica es tener una buena relación con ambos partidos para abogar por sus ciudadanos y lograr la tan ansiada estabilidad migratoria.

Demás está decir que hay muchos rubros más que pueden impactar la relación bilateral. Los republicanos y los demócratas tienen muchas coincidencias en política exterior pero también diferencias notables que pueden trazar rumbos en su visión de El Salvador.