Para los científicos las temporadas de huracanes acostumbran a dar inicio de manera progresiva, teniendo un comienzo lento donde muchas veces solo el 10% de la actividad de las tormentas de toda la temporada llega a desarrollarse antes de finales de agosto, con un pico más elevado a mediados de septiembre.

Sin embargo, mediante el comportamiento actual de la temporada de huracanes, los científicos consideran que este periodo de 2022 ha sido el menos activo en más de 30 años.

“La actividad media de los últimos 30 años sugiere que ya deberíamos haber visto ocho huracanes”, informó Steve Bowen, meteorólogo de la firma financiera de Red de Óptica Activa (AON).

Debido al marco histórico que se posee en cuanto a las condiciones climáticas de huracanes, los científicos predecían para estas fechas una temporada de huracanes mucho más activa de lo habitual, considerando que los estudios y datos meteorológicos parecen favorecer el desarrollo de tormentas en la región.

Los científicos advierten que, aunque de momentos las condiciones climáticas estén de manera diferente a las esperadas por los estudios realizados, aún no se ha llegado a la temporada más activa de huracanes dentro de la región, creando la posibilidad de que los cambios climáticos puedan ser más brusco e inmediatos en los siguientes meses.

"No está claro en este momento si solo nos espera una temporada supertranquila en la que todo el mundo rompe sus previsiones estacionales, o si las cosas van a repuntar notablemente a medida que nos acercamos al pico de la temporada", informó a la cadena Univision, Phil Klotzbach, experto en huracanes de la Universidad Estatal de Colorado.

Ante el inusual inicio de temporada de huracanes, los científicos consideran que estas modificaciones ambientales pueden crear el fortalecimiento de otros fenómenos atmosféricos como el fortalecimiento sobre el fenómeno de La Niña que es más frío y seco contrario al del Niño que es más cálido y lluvioso.