Con 21 años de edad y tres años estudiando Psicología, carrera que no pudo culminar al ser expulsado de la universidad, Philip Budeikin, de nacionalidad rusa incitaba a jóvenes de diferentes partes del mundo al suicidio con el juego de la "Ballena azul". Sin embargo, sus días de fechorías cibernéticas han terminado y eso se ha logrado gracias a su captura en su país natal hace unas semanas.

Se estima que en Rusia murieron 10 jóvenes por este juego, el cual consiste en realizar 50 desafíos, siendo el último el suicidio. En Uruguay hubo 4 casos y 2 en argentina. Budeikin enfrentará a la justicia por los suicidios a partir del desafío y por haber promovido 8 grupos suicidas en las redes sociales entre los años 2013 y 2016, según las autoridades del caso.

El creador enfatizó que los jugadores no son personas "son residuos biodegradables", quienes no tienen ningún valor para la sociedad. “Estaba limpiando la sociedad de tales personas", manifestó. Por otra parte confesó que no se arrepiente de todo el daño que ha causado con su creación, "sí, realmente lo hice. Murieron felices. Les di lo que no tienen en la vida real: calidez, comprensión y comunicación", dijo al sitio Saint-Petersburg.

Eduardo Bonomi, el Ministro del Interior uruguayo aprovecho la ocasión y recalcó, “"El problema es que el juego no es el juego del que pasa por esas pruebas, el juego es del manipulador, que tiene éxito cuando el manipulado se suicida. Por eso inducen al suicidio a adolescentes o personas con depresión psíquica, así los eligen y el que se cree que está jugando, en realidad están jugando con él", al hablar de los casos de su país.