El gobierno de Francia planea confinar, antes de que termine el año, a los 100 narcotraficantes más peligrosos en una prisión de alta seguridad, con el objetivo de evitar que sigan operando desde la cárcel.

El anuncio fue realizado por el ministro de Justicia, Gérald Darmanin, el domingo por la noche en una entrevista televisiva.

Darmanin explicó que se seleccionará una prisión francesa, la cual será vaciada y adaptada para garantizar el aislamiento total de estos delincuentes.

Estaría completamente aislada, segura y contaría con personal penitenciario especialmente capacitado”, detalló el ministro en la cadena LCI. Además, recalcó que con esta estrategia buscan demostrar que "cuando un narcotraficante está en prisión, no puede llamar por teléfono ni llevar una vida agradable".

Desde que asumió el cargo en diciembre, Darmanin, quien previamente lideró el Ministerio del Interior entre 2020 y 2024, ha convertido la lucha contra el narcotráfico en una de sus principales prioridades. “Debemos combatir las drogas como lo hicimos con el terrorismo, dotándonos de herramientas judiciales y administrativas sólidas”, afirmó.

El anuncio coincidió con la visita del ministro del Interior, Bruno Retailleau, al puerto de Le Havre, donde informó sobre la incautación de casi 47 toneladas de cocaína entre enero y noviembre, un récord histórico para el país, duplicando las cifras de 2023, cuando se confiscaron 23.2 toneladas.

Aunque estos decomisos representan logros importantes, los expertos señalan que solo una pequeña parte de la droga que circula en Francia es interceptada, lo que refleja el impacto limitado de estas acciones sobre el mercado. La expansión de la cocaína en Europa ha sido impulsada por un aumento en la producción en América del Sur y la saturación del mercado estadounidense, además de un incremento en el consumo europeo, según especialistas.

El narcotráfico afecta particularmente a Marsella, en el sureste del país, donde se registraron enfrentamientos entre grupos criminales como DZ Mafia y Yoda, que dejaron casi 50 muertos en 2023. En 2024, la cifra se redujo a 24, según datos de la AFP.