Los funcionarios de la ciudad de Mexicali, en Baja California, están pidiendo a los migrantes que permanezcan en los refugios y no se aventuren al norte de la frontera en los próximos días, cuando se espera que las temperaturas alcancen los 47°C, condiciones mortales para un caminante.
“Esto es un extremo para nosotros, nunca hemos estado en un lugar como este donde hace tanto calor, para mí esto es una incógnita”, dijo Jami, un migrante de El Salvador al equipo de Border Report, mientras buscaba permanecer en un refugio para no arriegarse.
La alcaldesa de Mexicali, Norma Bustamante, externó su preocupación ya que “mucha gente pasa y no conoce este tipo de clima y es mucha gente la que se atreve a cruzar el desierto hacia Estados Unidos”, y aseguró que en su ciudad fronteriza han abierto varios centros de hidratación para ayudar a los migrantes.
También están repartiendo paquetes de suero en polvo a los migrantes y residentes para que se mantengan hidratados durante el periodo de calor que se espera en las próximas semanas.
“El último informe que recibí decía que diez personas murieron recientemente debido al clima cálido”, lamentó Bustamante.
Cada año el calor extremo en Arizona, California y Texas se convierte en una trampa mortal para los migrantes que intentan cruzar a Estados Unidos, pero esta vez el cambio climático empeorará los riesgos, advierte defensores de migrantes.