“Estas condiciones climática junto con aguas oceánicas más frías y ascendentes, deberían dar como resultado en una tendencia de debilitamiento gradual”, indicó el MHC.
Los meteorólogos del organismo estadounidense aclaran que “sigue existiendo la posibilidad de que Pilar se debilite más pronto y se convierta en un ciclón postropical y debilitarse hasta convertirse en una vaguada”, en los próximos cinco días.
Pilar aumentó su velocidad luego de empujar fuertes aguaceros sobre El Salvador donde provocó tres decesos.
Mientras se aleja de la costa pacífica del norte de Centroamérica los expertos pronosticas que los remanentes de Pilar dejen algunas lluvias hasta el jueves, cuando la tormenta esté bastante alejada de la región.
“Los vientos máximos sostenidos han disminuido a cerca de 85 km/h. Se pronostica cierto debilitamiento durante los próximos dos días”, reitera el NHC en su más reciente boletín.
“Se espera que el oleaje generado por Pilar siga afectando la costa del Pacífico de Centroamérica durante los próximos días. Es probable que estas olas causen oleaje y desgarros potencialmente mortales”, advirtió el NHC.
Ruta actual de Pilar a convertirse en depresión tropical. NHC-NOAA
Área de impacto de vientos de Pilar. NOAA-NHC
Modelo de impacto y zona de influencia de Pilar