Cinco personas han sido detenidas por el incendio en un centro de detención migratorio de la mexicana Ciudad Juárez, fronteriza con Estados Unidos, que dejó 39 muertos y 27 heridos el pasado lunes, informó ayer la Fiscalía General.

”Ya se ejecutaron cinco” órdenes de aprehensión, dijo la fiscal especializada en Derechos Humanos, Sara Irene Herrerías, en una conferencia de prensa en la que se detalló que los fallecidos fueron 18 guatemaltecos, 7 salvadoreños, 7 venezolanos, 6 hondureños y un colombiano.

“En el transcurso del día se da la audiencia de imputación y vinculación, eso quiere decir que ya fueron puestos a disposición del juez”, añadió la fiscal.

La funcionaria precisó que un juez giró en total seis órdenes de arresto contra tres funcionarios del Instituto Nacional de Migración (INM), dos vigilantes privados y un migrante que habría iniciado el incendio, señalados de homicidio doloso y lesiones.

Sin embargo, no especificó quiénes fueron los detenidos.

En la misma conferencia, la secretaria de Seguridad Pública, Rosa Icela Rodríguez, reveló la nacionalidad de las víctimas mortales y dijo que los heridos son 5 salvadoreños, 10 guatemaltecos, 8 hondureños y 5 venezolanos. De ellos, solo uno fue dado de alta.



La funcionaria detalló que los salvadoreños Inmer Onesi Molina Hernández, de 20 años; Marvin Ardides García Pacheco, de 22 años; Carlos Alberto Pacheco Gutiérrez, de 43 años que se encuentran ingresados en el Instituto Mexicano de Seguro Social (IMSS).

Brayan Eduardo Flamenco Quinteros, de 27 años, se encuentra ingresado en el Hospital General de Ciudad Juárez; mientras que Misael Antonio Aguilar López, de 35 años está hospitalizados en el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).

Rodríguez anunció que el gobierno evalúa la ayuda que prestará a las familias de las víctimas, al tiempo que inició un proceso administrativo para revocar el contrato e imponerle una multa a la empresa a cargo de la seguridad del recinto.

Incumplimiento de deberes.

El incendio en la estación del INM se desató la noche del lunes, luego de que al menos un migrante prendiera fuego a colchones en medio de una protesta por una posible deportación, según las autoridades. El miércoles, las autoridades señalaron que el personal a cargo del centro de detención no hizo nada para evacuar a los migrantes y que ocho personas habían sido identificadas como presuntas responsables de esa omisión.

A la indagatoria de las autoridades fue incorporado también un video de vigilancia en el que se observa cuando inician las llamas sin que aparentemente los encargados abrieran la celda donde estaban los migrantes detenidos.

Cruce masivo tras tragedia

Unos 1.000 migrantes cruzaron ilegalmente la frontera entre México y Estados Unidos el miércoles, dos días después de un incendio en el centro de detención que mató a 39 personas en la mexicana Ciudad Juárez.

La patrulla fronteriza de EE.UU. señaló en Twitter que los migrantes, principalmente venezolanos, llegaron a El Paso (Texas) para entregarse a sus agentes. Los migrantes pasaron a pie el río Bravo (río Grande en Estados Unidos), que marca la frontera entre los dos países.

Hace el “trabajo sucio”

“Lo que pasó en Ciudad Juárez es la olla de presión de las políticas de Estados Unidos”, dijo a la AFP Eunice Rendón, especialista en migración.

A México “le está tocando ese papel de hacer el trabajo sucio”, dice Rendón, quien reconoce, no obstante, que el gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador ha intentado una política “más humanista” hacia los migrantes, como en el otorgamiento de asilo. México recluyó en 2022 a 281.149 personas y expulsó 98.299 a Centroamérica.