Esta política fue establecida por el gobernador texano, Greg Abbott, quien arremete contra los cruces migrantes, porque considera a los indocumentados como una amenaza y riesgo para la seguridad pública de los pobladores de su Estado.
Abbott afirmó que los militares mantienen diferentes medidas en la zona fronteriza que les permite detener, bloquear y expulsar a las personas que intentan cruzar hasta EEUU por diferentes puntos de la frontera.
“Los soldados de la Guardia Nacional de Texas desplegados en la Operación Estrella Solitaria continúan bloqueando y rechazando a los inmigrantes ilegales que intentan cruzar a Texas”, reiteró el gobernador Abbott.
En su cuenta de X también compartió una serie de fotografías en las cuales demuestra como los militares de la Guardia Nacional y las barreras de púas impiden que los migrantes crucen ilegalmente, obligándolos a retroceder y desistir de su intento por ingresar a suelo texano.
El gobernador republicano se ha caracterizado durante su gestión por mantener una postura en contra de los migrantes, a quienes ha llegado a trasladarlos y expulsarlos de su Estado en condiciones inhumanas.