Ante las múltiples quejas de organizaciones, políticos e incluso del gobierno del presidente Joe Biden, la administración de Texas sigue firme en mantener las medidas antinmigrantes instaladas desde el 2022 en la frontera con México, especialmente en el despliegue de militares y la colocación de cercas de púas.

“La Guardia Nacional de Texas continúa manteniendo la línea en Eagle Pass. Texas no dará marcha atrás en nuestros esfuerzos por asegurar la frontera en ausencia de Biden”, arremetió el gobernador de Texas, Greg Abbott.

Bajo la operación Estrella Solitaria el gobernador Abbott ha implementado diferentes estrategias destinadas a contener el cruce de migrantes provenientes desde México, pero estas medidas han sido criticadas por representar un riesgo para las personas y aumentar las posibilidades de que mueran en su intento por cruzar hasta Estados Unidos.

Texas mantiene desplegados a miles de soldados de la Guardia Nacional, quienes limitan el cruce de los migrantes, así como las cercas de púas de aproximadamente dos metros de alto que están en diferentes zonas de la frontera.

Recientemente el gobierno de Biden y la fiscalía de México culparon a Texas por la muerte de una madre migrante y sus dos hijos mexicanos, quienes perdieron la vida ahogados en el río Bravo cuando trataban de cruzar a EEUU. Ante este caso las autoridades de ambos países acusaron a los militares de Texas de impedir que elementos de la Patrulla Fronteriza brindaran asistencia y rescate de los tres migrantes.