El gobernador de Texas, Greg Abbott, ordenó nuevamente que los militares de la Guardia Nacional reforzaran y aumentaran las cercas de púas instalados en varios kilómetros de la frontera entre México y Estados Unidos. Estas estrategias antimigratorias son implementadas desde marzo de 2022, pero en los últimos meses el Estado ha reforzado dichas medidas para evitar cualquier intento de cruces ilegales provenientes desde México.

Las cercas de púas miden más de dos metros de alto y entre bloques también contiene filosas cierras para que los migrantes no intenten escalarlas o pasar por debajo de ellas. Estas cercas están instaladas especialmente en zonas desérticas, pasos ciegos de la frontera y en las orillas del río Grande, los cuales son puntos estratégicos donde los migrantes intentan cruzar ilegalmente.

Las cercas de púas son una de las tres recientes medidas antimigrantes que el gobierno de Texas ha implementado en las zonas fronterizas con México. En las cuales también destacan el despliegue masivo de militares en frontera y la construcción y ampliación del muro fronterizo en zonas donde no existía.

Estas medidas han sido criticadas tanto por organizaciones proinmigrantes como por el gobierno del presidente estadounidense, Joe Biden, por considerarlas como factores potentes que ponen el riesgo la vida de miles de migrantes.