En la resolución Hanen aclaró que su sentencia permitirá que los cerca de 600,000 beneficiarios o "dreamers" sigan renovando los amparos de deportación y permisos de trabajo, cuya protección también ampara a 24.590 "soñadores" salvadoreños.
Hanen estuvo de acuerdo con Texas y otros ocho estados que presentaron demandas para detener DACA. Fuentes judiciales le dijeron al Chicago Tribune que esperan que el fallo del juez sea apelado ante la Corte Suprema de Estados Unidos.
El juez prohibió al gobierno de la administración de Joe Biden aprobar nuevas solicitudes, pero dejó el programa intacto para los beneficiarios existentes durante el esperado proceso de apelación. Hanen dijo que su orden no requiere que el gobierno federal tome ninguna medida contra los beneficiarios de DACA.
Los Estados que buscaban frenar el DACA reclaman que la administración del expresidente Barack Obama no tenía la autoridad para crear el programa por primera vez en 2012 porque eludió al Congreso.
La administración Biden intentó satisfacer las preocupaciones de Hanen con una nueva versión de DACA que entró en vigencia en octubre de 2022 y estuvo sujeta a comentarios públicos como parte de un proceso formal de elaboración de reglas. El juez dictaminó que la versión actualizada de DACA todavía era ilegal.
Los estados demandantes contra DACA son Texas, Alabama, Arkansas, Luisiana, Nebraska, Carolina del Sur, Virginia Occidental, Kansas y Mississippi.