El presidente de Ucrania, Volodimir Zelenski, rechazó este jueves la propuesta de un alto el fuego inmediato que congele el conflicto con Rusia. En su lugar, instó a Estados Unidos y a la Unión Europea a desarrollar un "plan real" que incluya "garantías de seguridad" para finalizar la guerra.

Zelenski declaró en una rueda de prensa en Bruselas, tras participar en la cumbre de líderes de la UE, que "no podemos vivir con un conflicto congelado".

Afirmó que es fundamental tener claridad sobre lo que sucederá tras un alto el fuego, advirtiendo que sin un acuerdo sólido, el conflicto podría reanudarse en el futuro.

"Necesitamos un plan real, una posición fuerte y cuento con la unidad de Estados Unidos y la Unión Europea", subrayó.

El presidente ucraniano también destacó la importancia de contar con apoyo para disuadir futuras agresiones rusas. "Si tenemos un alto el fuego y todos están felices, pero Putin vuelve en dos meses, perderemos todos y no lo quiero", enfatizó.

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Además, Zelenski expresó su deseo de establecer una paz "estable" en Ucrania, confiando en el apoyo del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump.

Zelenski criticó a Rusia por su falta de interés en una paz justa, afirmando que a Putin "le encanta matar" y que representa un "peligro" global. Esto lo dijo en referencia a la reciente amenaza del Kremlin sobre un "duelo de alta tecnología" utilizando misiles hipersónicos.

En cuanto a las garantías de seguridad que solicita, Zelenski no proporcionó detalles específicos, pero insistió en que deben ser un "mecanismo" real de apoyo a Ucrania hasta su eventual entrada en la OTAN, que es considerada como la "garantía última".

La propuesta de Emmanuel Macron de desplegar una misión de paz con efectivos europeos en Ucrania también ha cobrado relevancia en las discusiones.

Zelenski mostró su apoyo a la idea, aunque pidió más información sobre la cantidad de tropas y sus funciones ante posibles ataques rusos.


La cumbre de líderes de la UE se lleva a cabo en un contexto de creciente debate sobre el apoyo militar y económico a Ucrania, con un enfoque en la entrega de sistemas de defensa antiaérea y el fortalecimiento del entrenamiento de las brigadas ucranianas.

Zelenski reiteró su demanda de "garantías de seguridad" a sus aliados europeos para hacer frente a la continua amenaza de Rusia.