Akio Toyoda, antiguo presidente de Toyota Motors, expresó recientemente que "la industria está llegando a reconocer que no hay una sola respuesta para reducir las emisiones de carbono". Sus palabras llegan como postura crítica a lo inevitable: el crecimiento exagerado en las ventas de los vehículos eléctricos.

Toyota, principal impulsora de la hibridación en vehículos, lleva tiempo alertando. El gigante japonés nunca ha estado completamente convencido que esto es una alternativa de futuro, planteando como más favorable un escenario electrificado (que no eléctrico) con alternativas mixtas, como el vehículo híbrido. "No hay una sola respuesta para reducir las emisiones de carbono", dijo Toyota a mediados de semana en el salón del automóvil de Tokyo.

Fundamentos sólidos.
No hay una base de clientes suficientes para sostener el crecimiento de este mercado, las baterías siguen siendo grandes, costosas y pesadas, y la autonomía sigue siendo muy complicada en determinados escenarios.

Algunos datos empiezan a darle la razón a Toyota. Las ventas de los vehículos eléctricos llevan dos años creciendo sin parar.
  • ·El año 2022 se cerró con 10 millones de unidades vendidas, esperando subir hasta los 14 millones al cierre de 2023. Los analistas vaticinaban un crecimiento estable año tras año, aunque hay datos que ponen en entredicho esta tendencia.
  • Volkswagen ya habla de que sus pedidos han bajado un 50% en Europa, pese a haber aumentado un 45% interanual las entregas de sus vehículos eléctricos y ser el territorio europeo su principal mercado.
  • Fabricantes como Ford han corregido a la baja sus perspectivas de fabricación y ventas, aplazando la fecha en la que prometían llegar a fabricar dos millones de carros eléctricos. Al cierre de 2022, otros fabricantes como Renault habían vendido 228,000 unidades de carros electrificados. Sus previsiones eran de medio millón.
Un asunto de mercados.
La adopción del carro eléctrico sigue inherentemente ligada a los distintos tipos de mercado. Las diferencias son abismales. En países como Noruega son el paraíso del carro eléctrico. En el mes de septiembre las matrículas de turismos eléctricos puros suponen un 84,3%. Los carros de gasolina apenas superan el 1% y los diésel el 2,5%.

No hay muchos secretos para estos peculiares datos; la venta de vehículos eléctricos está ampliamente subvencionada allí. Sin hablar de que ocupa una posición privilegiada entre los países con mayor poder adquisitivo. Un ejemplo similar es el de Suecia, con un 41,9% de matriculaciones 100% eléctricas y casi un 30% híbridas.

Los carros de gasolina siguen siendo la opción más demandada con un 34,1% de cuota, cifra ligeramente inferior al 35,3% que alcanzaron el pasado año. Los datos de países Bajos, Suecia y Francia, con una gran adopción del coche eléctrico, con principales responsables del pequeño valle en la fotografía general de adopción de vehículos gasolina y el ligero crecimiento en eléctricos.