Hace un par de semanas, Alejandro Sanz compartió con sus seguidores que pasaba por una crisis emocional. Poco después, salió a la luz la noticia de su ruptura con Rachel Valdés después de tres años de relación, lo que habría coincidido con la traición de un amigo en temas financieros, pero el cantante ha dejado claro que no dejaría sus conciertos pese a la depresión.


Y ha cumplido su palabra, pero la clave para que el astro de 54 años se mantenga en pie, sería su hija Manuela Sanz, de 21 años. Justo antes de empezar el tour musical, reflexionó en Instagram: “meditar es esa voz que habla desde dentro. Que nos grita y empuja a creer en nosotros mismos. Pero sobre todo, a entender que la vida empieza cada día". La publicación recibió muchos mensajes de apoyo, incluido el de su hija mayor, a lado de la modelo mexicana Jaydy Michel. “Fuerte y valiente”, escribió Manuela Sanz junto a un corazón para mostrar su apoyo.

Manuela, quien tiene su propia marca de moda Bolge Shorewear, siempre ha demostrado una conexión especial con su papá, y en ocasiones le acompaña a sus eventos. De hecho, llegó a posar junto a Rachel Valdés demostrando que entre ellas había buena relación.

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