La diva nunca quiso aclarar de cara a los medios o a sus fans hasta qué punto la historia que narraba en sus canciones era real o una licencia artística, pero el reciente lanzamiento del último trabajo de su marido, ‘4:44’, ha venido acompañado de una entrevista exclusiva en la que confirma que su relación no siempre ha sido un camino de rosas, y en la que además parece poner en duda incluso la solidez de su unión, algo que contrasta notablemente con la imagen de felicidad que su esposa y él habían proyectado en todo momento hasta hace poco más de un año.
“Esta es mi vida real. Acabé en este sitio y construimos una enorme y preciosa relación, pero no estaba basada al 100 % en la honestidad, y empezó a agrietarse”, se sincera el artista neoyorquino en uno de los extractos de ‘Footnotes for ‘4:44’’, vídeo que se puede encontrar en Tidal, la plataforma de ‘streaming’ de la que es fundador y propietario.
El también productor relata en la misma conversación -en la que intervienen también Kendrick Lamar, Will Smith, Chris Rock y Jesse Williams- que la crisis de su matrimonio es lo más difícil que ha tenido que afrontar nunca y que ha resultado incluso más aterrador que las tres ocasiones en que fue disparado durante su adolescencia en Brooklyn, cuando vendía crack.
En la canción que da título a su disco, ‘4:44’, Jay-Z confiesa que le fue infiel a su esposa y se arrepiente sobre todo por cómo esta información podrá afectar a sus hijos en un futuro cuando se enteren, además de ofrecer una disculpa a la intérprete de ‘Formation’.
“Si mis hijos se enteraran, no sé qué haría. Si no me vuelven a mirar con los mismos ojos, probablemente muera lleno de vergüenza. ¿Hiciste el qué con quién? ¿De qué sirve un trío cuando tienes un alma gemela?”, dice parte de algunos de los versos que tanta polémica han generado.
