Entre ellas destaca Sofía (interpretada por Marissa Reyes), una talentosa cheerleader del equipo Los Angeles Waves cuya abuela tiene un restaurante de comida salvadoreña, según se muestra a través de sus platillos.
Lee además: "Hno. Raymond Ayala (Daddy Yankee) demanda a exesposa por $250 millones".
¡Alerta de Spoiler! En una de las escenas del último episodio, Jackie Moreno (Fabrizio Guido), el recién descubierto hermanastro de Isla y sus hermanos, quien llega a trabajar en el equipo tras la muerte de su madre, tiene un incómodo primer encuentro con Sofía que termina en una cena de disculpa. En ese momento, entre risas y conversaciones en español, Jackie nota su acento y le pregunta directamente: "¿Salvadoreña?". Con orgullo, Sofía confirma y agrega: "Nacida y criada en Lincoln Heights".

La conexión entre ambos personajes se vuelve aún más especial cuando descubren que sus familias estaban entrelazadas sin saberlo.
Durante la cena, Sofía menciona que su abuela es dueña del Maya’s Grill (La parrilla del maya), un restaurante en el barrio donde creció. Para sorpresa de Jackie, ese era el mismo lugar al que solía ir con su madre cuando era niño, un espacio lleno de recuerdos y tradiciones familiares.

A lo largo de la primera temporada, este vínculo cultural se convierte en un punto de unión entre ambos.
El momento más emotivo llega cuando Jackie, en un intento por reconectarse con su madre fallecida, regresa solo a Maya’s Grill. En la mesa frente a él, vemos el platillo por excelencia de El Salvador: pupusas, acompañadas de curtido y rodajas de pepino, evocando los recuerdos de su infancia.
Mientras come en silencio, sus hermanos lo encuentran y deciden unirse a él, transformando lo que parecía una comida solitaria en un acto de unión familiar. Con esta escena, "Running Point" no solo muestra la comida como un símbolo de identidad, sino que le da a la cultura salvadoreña un espacio en la pantalla global, celebrando sus sabores y tradiciones.