Originario de Chalchuapa (en el departamento de Santa Ana) empezó desde muy joven en el mundo de la producción musical, aunque reconoce que no conocía mucho de la edición, el estudio donde trabajó contaba con un buen equipo técnico.
“Mi etapa en la música comienza desde que era muy pequeño, 12 o 13 años cuando ya era músico y conozco a unos dueños de un estudio de grabación y me quedo como asistente”, relató a Diario El Mundo.
“Todo era muy empírico, todo lo aprendía traveseando”, agrega.
Y casi cinco años más tarde, desilusionado por comparar discos ajenos con los de él, dejó de lado la producción musical, aunque siguió haciendo música. Fue en este periodo en que se formó como docente.
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Del occidente del país a Estados Unidos.
Hace 15 años, Pineda viajó a Estados Unidos y comenzó a recibir ofertas de empleo como músico y a conocerse con otros afines a la industria musical.“Conozco a Rafa Sardina, un productor e ingeniero de grabación que ya era parte del mundo de los Latin Grammy y me lleva a su estudio increíble y como que me reenamoré de esa carrera y empecé a estudiar producción”, relató Pineda.
“A mí me fascinó más la parte de ser productor, estar viendo el proceso completo de una producción”, agrega.
A partir de ahí, no dejó su nueva ocupación, aún cuando explica que las ofertas laborales como cantante no le faltaron.
Luego, encantado por el negocio de la música, obtuvo una certificación en el Berklee College of Music.
Fue entonces cuando trabajó simultáneamente como productor y consultor con los artistas.
Su Grammy.
Trabajó con el cantautor español Marcos Vidal a quien le produjo un disco titulado “25”.Luego, su producto llegó finalmente a la Academia de Grabación en 2016 y se lleva gracias a este el premio a premio Grammy Latino al Mejor Álbum Cristiano (en español) .
Pineda, quien desde años atrás admira a Vidal, analizó los elementos que quizás hacían falta para que obtuviera un Grammy y ya como su productor trabajó en ello.
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Un estudio de grabación en El Salvador.
Pineda cree fielmente en que vale la pena instalar un estudio en el país porque confía en el talento musical de muchos salvadoreños.“Creo en el talento salvadoreño. No quisiera descansar hasta ver a un salvadoreño desde El Salvador con una nominación al Grammy”, dice Josué Pineda.
Asimismo, asegura que espera que dicho estudio, que próximamente estará en San Salvador, servirá como referente para otros artistas latinos.
Otros proyectos.
Este año se enviarán cinco de los discos en los que ha trabajado para que obtengan una nominación en los Latin Grammy. Es esta etapa abierto a otros géneros, más allá de la música cristiana.“No podemos vivir de victorias pasadas, vamos a pelear y buscar un segundo, un tercero (álbum nominado y ganador)”.
Así también dentro de dos meses lanzará una serie de tomos que servirán de guías para artistas emergentes en el país.
El dato
José Pineda explica que lo más importante de un productor musical es conocer muy bien a los músicos porque no todos son para los mismos proyectos.“Al final un productor es como un director técnico que sabe qué piezas va a meter en su partido para obtener los mejores resultados”.