El 7 de septiembre la Procesión de los Farolitos llena de color y alegría las calles de los municipios de Ahuachapán, especialmente Concepción de Ataco.

La celebración se centra en la misa y posterior procesión en honor al nacimiento de la Virgen María o Virgen Niña. Como parte del ritual, los católicos encienden velas dentro de farolitos de madera y papel celofán de distintos colores, y con estos montan hermosos altares.



Hay varias teorías del origen de la tradición: algunos hablan de más de 130 años de existencia: en el año 1893, cuando desde Guatemala trajeron una imagen de la Virgen Niña, también conocida como Virgen de la Merced, encargada por la fiel Jesús de Eguizábal, quien ese mismo año le colocó faroles con un significado de fe.

La fiesta se convirtió en las últimas décadas en una referencia para el turístico pueblo de Ataco, pero lo cierto es que también se celebra con gallardía en Ahuachapán y sus monucipios San Francisco Menéndez, San Lorenzo, Atiquizaya, Apaneca y en cada vez más, en los distintos destinos de la llamada Ruta de las Flores.

Fue así como en 2014 la Asamblea Legislativa declaró “El Día de los Farolitos” como Patrimonio Cultural Inmaterial de El Salvador.

La actividad reúnce a cientos de familias y sus pequeños que gozan de la iluminación.
La actividad reúnce a cientos de familias y sus pequeños que gozan de la iluminación.

Cabe mencionar que Ataco es el destino favorito para miles de salvadoreños que año con año se desplazan hasta su casco colonial, ubicado a 94 kilómetros de San Salvador.

Este jueves 7 de septiembre de 2023, la Santa Misa será a las 5:00 p.m. El acto de iluminación y bendicion del farolito será en la plaza central, por el párroco Fray Rafael Fernández. La procesión recorrerá luego las principales calles del pueblo, visitando altares y arreglos de los farolitos.

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