Los datos estadísticos que hizo público el Minsal señalan que en la primera semana epidemiológica de agosto, que incluye dos días de julio, detectaron ocho contagios de covid-19, mientras que la segunda súbitamente aumentó a 20.
Sin embargo, el dato más alto aparece en la cuarta semana del mes, entre el 20 y el 26 de agosto, donde al menos 28 personas dieron positivo a una prueba de Reacción en Cadena a la Polimerasa (PCR), en unidades públicas u hospitales.
A principios de septiembre, el ministro de Salud, Francisco Alabi, reveló en una entrevista televisiva que la cartera de Estado que dirige detectó hasta 40 casos de covid, a la semana, pero este dato no se ve reflejado en los informes del mismo ministerio.
A mediados de agosto y luego de las vacaciones, los médicos del área privada alertaron de un incremento en los contagios del SARS-CoV2, añadiendo que éstos tenían los síntomas de la reciente subvariante de Ómicron, EG.5, conocida como “Eris”.
Esta información fue constatada porque los salvadoreños volvieron a acudir las unidades médicas y hospitales, especialmente, aquellas zonas donde habitualmente estaban los griparios.
Personal de salud de las clínicas confirmó a Diario El Mundo, que en esos días, el virus que provoca el covid-19 estaba activo y contagiando a la población.
A pesar que el Ministerio de Salud tiene un equipo especial para realizar estudios y saber qué tipo de variante infecta a los salvadoreños, no ha hecho público qué causó el aumento de los contagios en agosto recién pasado.
En septiembre, los médicos afirmaron que las consultas por covid-19 descendieron nuevamente, pero piden estar alertas por nuevos incrementos y los síntomas que estos pueden traer.
Investigaciones periodísticas han revelado que en este nuevo incremento hubo muertes por covid-19, que no fue confirmado por el ministro; por el contrario, el ministro Francisco Alabi, reprochó que ocurren más muertes por inflluenza y neumonías, que debido a los contagios del covid-19, a más de tres años de iniciada la enfermedad.