La institución detalló que el oleaje ha incrementado en la costa salvadoreña debido a las tormentas extra tropicales en el hemisferio sur de la Antártida. Se prevé que los vientos alcancen hasta 80 kilómetros por hora (km/h) en algunos sectores, por encima del valor típico en El Salvador de 35 km/h, y las olas lleguen hasta 1.7 metros de altura.
La alerta estará vigente hasta el 7 de septiembre, aunque puede ser prorrogable según la situación. Mientras tanto, las inundaciones del sábado dejaron una estela de daños en ranchos, viviendas e infraestructura.
El administrador del muelle del Puerto de La Libertad, Martín Cornejo, detalló que las fuertes olas que rompían sobre el muelle dañaron la capa asfáltica de la infraestructura, así como la caseta en la que los pescadores bajan sus lanchas.
“El daño que ha habido aquí en el muelle es estructural, la capa de pavimento ha sido levantada y está toda dañada lo que implica que la pesca pueda quedar suspendida por lo menos uno a dos meses”, declaró Cornejo a Diario El Mundo.
Cornejo advirtió que, si no hay una intervención pronta para reconstruir la infraestructura, los pescadores tendrían que buscar zonas aledañas para salir al mar y eso generaría más costos operativos.
“El oleaje vino a dañar más el piso del muelle y de haber necesidad de entrar por las playas se buscaría, por ejemplo, la playa San Diego o Las Flores para poder salir al mar, pero esto ya sería gasto extra porque tendríamos que mover lanchas y equipos”, expuso el pescador.
Según el administrador, alrededor de 560 personas, entre pescadores y comerciantes de la zona, pueden resultar afectados ante la falta de salida a mar abierto.
Viviendas afectadas.
El fuerte oleaje del fin de semana también dejó daños en las viviendas de la comunidad Las Ostras, en Conchalío, La Libertad, donde el agua rompió puertas y arrastró basura hacia los hogares.“A nosotros nos ha destruido el ranchito, las duralitas están todas quebradas, el agua se metió en toda la champita y nos mojó todo: camas, sofás, ropa; solo han sido pocas las cosas que logramos sacar, pero lo demás está arruinado”, expresó Otilia Ramírez.
Los lugareños reportaron que el desbordamiento del mar ocasionó la muerte de varios pollos y el arrastre de una menor de un año, quien al momento del ingreso del oleaje se encontraba fuera de casa; sin embargo, los familiares lograron rescatar a la menor.
Debido al peligro de la zona, el residente Carlos Olivar indicó que las mujeres y los menores de edad se refugian en una iglesia del sector y en los hogares han desconectado las cajas eléctricas con el propósito de evitar incidentes mayores.
Además, las fuertes olas del fin de semana dejaron afectaciones e inundaciones en la Playa Majahual y El Sunzal.