El presidente de la República, Nayib Bukele, urgió a la Corte Suprema de Justicia (CSJ) que destituya a los jueces "cómplices" del crimen organizado, tras conocer el fallo de un juez especializado que absolvió a 42 supuestos miembros de la pandilla 18 por falta de pruebas.

A través de su cuenta de Twitter, Bukele informó que no se ha liberado a ningún pandillero, a pesar que un juez "intentó liberar" a 42 acusados de un caso de 2019. "Todos continúan en prisión y el caso pasará a una instancia superior.

El mandatario se refirió al fallo del Juez Especializado de Sentencia "A", de San Salvador, que absolvió a 42 supuestos pandilleros que operaban en Panchimalco, a quienes la fiscalía inculpaba por nueve homicidios agravados, tres proposiciones para cometer asesinato y cinco casos de privación de libertad, así como por agrupaciones ilícitas, en hechos ocurridos entre 2008 y 2019.

Hago un llamado a la Corte Suprema de Justicia a remover a los jueces cómplices del crimen organizado".

Nayib Bukele
Presidente de la República


Bukele también hizo un llamado a la Fiscalía General de la República (FGR) a "investigar los posibles nexos de este juez con el crimen organizado y las estructuras terroristas".

Desde el pasado 1 de mayo, el partido oficialista comenzó las destituciones sumarias de funcionarios del Órgano Judicial y del Ministerio Público. Aunque se inició con los magistrados de la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia, y el titular de la Fiscalía General de la República, estas remociones alcanzaron a cientos de jueces y fiscales con sucesivas reformas a leyes judiciales.

¿Por qué fueron liberados?

La estructura de 42 supuestos miembros de la pandilla 18 operaba en Panchimalco, al sur de la capital, y fue absuelta por el Juzgado Especializado de Sentencia “A” de San Salvador.

El juez antimafia fundamentó su fallo en la falta de pruebas por parte de la Fiscalía para demostrar los delitos y la participación de cada uno de los acusados en los hechos.

Entre las pruebas utilizadas por la Fiscalía destaca el testimonio de uno de los imputados –identificado con la clave Poseidón- que se acogió a los beneficios penales a cambio de ayudar a esclarecer los hechos.

Según el juzgador, las declaraciones del testigo “Poseidón” fueron “incongruentes, imprecisas y ambiguas”; ya que no coincidió en las personas que señaló en los hechos, lugares, fechas y circunstancias en que se dieron los homicidios y que para el operador de justicia, no le merece ninguna “credibilidad”.

El juez remarcó que “el triunfo de un proceso penal no era la condena, sino llegar a la verdad de los hechos procesales”.

La Fiscalía, por su parte, dijo estar "satisfecha" con las pruebas presentadas, y adelantó que presentarán el recurso de apelación ante un tribunal superior.

Un testigo poco creíble

La defensa aplaudió la decisión del juez y la consideraron “que como conocedor de la causa ha sido justo y objetivo”.

La abogada Norma Barrera se refirió a uno de los casos que el juez valoró en su fallo y es el relacionado a una familia de cinco personas en Panchimalco, que el 2 de septiembre de 2017, tuvieron que salir huyendo por las amenazas de la pandilla.

Un joven de esta familia, conocido como Moisés, fue privado de libertad y desaparecido. A la fecha se desconoce de su paradero y "Poseidón", el testigo clave de la Fiscalía, participó en esta desaparición.

El sujeto, sin embargo, no pudo ubicar el lugar donde dice que enterraron a Moisés, lo que restó credibilidad en su testimonio. Al verse expuesto, incluso señaló que el cuerpo había sido desenterrado y transportado a otro lugar que desconoce.

“Lejos de ser un testigo idóneo, creíble, se volvió mendaz por eso tenemos esta sentencia”, concluyó Barrera.