Sin previo aviso, más que del boca a boca entre los pasajeros, el Viceministerio de Transporte (VMT) puso a operar las nuevas rutas en sustitución de las que administrada el empresario Catalino Miranda, la 42 y 152.
Durante más de un año, el Gobierno operó las rutas de manera gratuita después de que en marzo de 2022 detuvieran al empresario, por supuestos delitos de venta a precio superior, resistencia y desórdenes públicos.
En ese entonces, el Ministerio de Obras Públicas aseguró que iniciaban un proceso para retirarle la concesión de la ruta a Miranda, pero a la fecha, la cartera de Estado no ha informado si la quitó. Tampoco, si la nueva ruta fue entregada a otro operario.
El punto de la ahora extinta ruta 42 se mantenía en las cercanías de la plaza Zurita, donde siguen estacionados los microbuses de Miranda, cuidados por una que otra persona y los perros guardianes.
Sin embargo, desde el fin de semana el Gobierno cambió el punto de salida y comenzó a cobrar por el servicio, cuando se vieron los nuevos "colores" de los buses con las terminales.
Las nuevas rutas
La ruta más larga es de Zaragoza a San Salvador, operada por las unidades 40D. El trayecto comprende desde este municipio hasta una terminal habilitada en el museo de Ferrocarriles Nacionales de El Salvador (Fenadesal), sobre la avenida Peralta. El costo es fijo de $0.50, sin variaciones según la distancia.Luego están las rutas 40-C, que conectan San Salvador con La Sabana, en Santa Tecla, y tiene un costo de $0.20. Además, la ruta 40-E que viaja desde el Centro de San Salvador hasta Antiguo Cuscatlán, además de la 40-A cuyo recorrido comprende la Exterminal de Oriente hasta Santa Tecla.
"Si vas para San Salvador, los $0.50 te salen bien porque con los microbuses se Catalino pagábamos $0.75", considera una pasajera en una parada sobre la Avenida Independencia, en San Salvador.
Los usuarios acostumbrados al punto en esa avenida seguían llegando este lunes, confundidos, buscando los buses.
En el lugar solo quedan las letras pintadas sobre el pavimento de la señal de meta para los motoristas. A un costado unas pequeñas tiendas y en el punto que solía ser de salida de los microbuses un hombre ofrecía servicios sanitarios.
"Una mujer con camisa del VMT se encontraba, no sé si asignada al lugar o por coincidencia, indicando a dónde teníamos que caminar como dos cuadras más adelante", explicó una pasajera.
Los buses también cambiaron el trayecto. Antes, por los trabajos en el Centro Histórico, rodeaban por la calle alameda Juan Pablo hacia el Instituto Nacional de los Deportes. A partir de esta semana, esquivan las obras y toman la Avenida España para seguir el anterior trayecto.
"Uno esperaría que hoy que cobran, manden los buses más seguido, como antes, pero no, siempre están tardados", se quejó una mujer que tenía 20 minutos esperando.
Al llegar a Zaragoza, la ruta 40D continúa su trayecto hacia las comunidades rumbo al puerto de La Libertad. Un trayecto de cinco o 10 minutos, también cuesta $0.50. El motorista repite y repite "es el nuevo pasaje".
Los pasajeros de Brisas de Zaragoza y comunidades cercanas pagaban antes $0.30, si se iban en el microbús de la ruta 42, que manejaba Catalino Miranda, e incluso la ruta 102, que va hacia el puerto de La Libertad, pero está última subió el pasaje después del paro de operaciones en 2020 a $0.60.
"Hoy la opción es pagar la del puerto o la del Gobierno, ambas más caras que antes", se queja un hombre en la parada principal en Zaragoza.