Dos días después que la tormenta Julia, castigara el suroriente de El Salvador, equipos de Bomberos y de la Fuerza Armada continuaban este martes rescatando a familias que han quedado atrapadas en sus hogares tras el desbordamiento del Río Grande, en San Miguel

Imágenes de sun sobrevuelo en helicóptero mostraban la amplia región del valle migueleño anegado por las crecidas, y en una de la imágenes se puede ver a una familia en el patio de su hogar con el agua hasta la cintura.

En otra de las publicaciones de Protección Civil muestran a uno de sus equipos moviéndose en los caminos anegados del caserío Santa Fidelio, en el cantón La Canoa, donde las agua inundaron todo.

Las labores de verificaciones de las comunidades anegadas también se extendieron hasta el cantón El Tecomatal, donde muchas familias evacuaron y siguen aisladas, aunque ya realizaron evacauaciones durante la noche del lunes en los caserios El Picudo y El Consuelo.

"A veces creemos que porque ya no observamos lluvias ya no hay riesgo, sin embargo después de estas situaciones es necesario observar cualquier característica que denote riesgo en nuestras viviendas”, recordó Luis Amaya, director de Protección Civil.

Amaya dijo este martes que tras el paso de la tormenta se han realizado más de 300 rescates. También detalló que "tenemos 2,097 personas albergadas, 678 familias en los diferentes albergues habilitados a nivel nacional".