El Cardenal había presentado su renuncia al cumplir los 75 años, tal y como lo establecen los cánones de la iglesia católica, pero esta fue aceptada hoy.
“Pienso interpretar los sentimientos del señor Arzobispo de San Salvador y de todos los salvadoreños, de los sacerdotes, religiosos, religiosas y de todos los hombres y mujeres de buena voluntad para expresar agradecimiento al señor por larga, sabia, generosa y discreta labor del Cardenal Rosa Chávez pare el para el progreso espiritual y material del pueblo salvadoreño”, destaca la aceptación de la renuncia.
El alcanzar los 80 años de edad es un motivo de alegría dentro de la iglesia, pero también la pérdida de algunos privilegios. Tras cumplir 80 años de edad el Cardenal salvadoreño también deja el grupo de los cardenales con la autoridad de la Iglesia Católica de poder elegir a un nuevo papa de presentarse la necesidad de un cónclave.
Es un proceso normal
“Esto es normal en la iglesia y significa que ya no soy obispo titular, ahora soy obispo emérito, como el papa Benedicto. Somos tres eméritos acá en el país”, destacó el Cardenal en una conferencia la mañana de hoy martes.
El Cardenal se mantendrá como párroco de la iglesia San Francisco en San Salvador.
Tras la dimisión, nuncio apostólico comenzará a hacer consultas entre los candidatos para nuevo Obispo Auxiliar de San Salvador, puede ser de la diócesis de la capital o de otro departamento.
No hay un periodo de tiempo determinado para realizar el proceso de sucesor, afirmó.
El Cardenal negó que su renuncia tenga alguna relación con temas de coyuntura nacional.
Anunció que el 14 de octubre está reunido con el papa Francisco y otros cardenales, en Roma. Compartió que comenzará a escribir sus memorias.
“Estoy muy contento, muy agradecido, seguiré atento en todo aquello lo que pueda ayudar”, destacó.