Un informe elaborado por el Observatorio Universitario de Derechos Humanos de la Universidad Centroamericana José Simeón Cañas (OUDH) señaló que los enfrentamientos entre la Policía Nacional Civil, Fuerza Armada y grupos de pandillas aumentaron un 62.9 % en comparación con los registrados en 2021.

“Durante 2022, la PNC registró un total de 171 enfrentamientos armados, un 62.9 % más que el 2021, cuando se registraron 105”, afirmó Jorge Rodríguez, quien es coordinador del OUDH.

Explica que el dato indica un promedio de dos enfrentamientos cada dos días, similares a las registradas en 2020. Los enfrentamientos dejaron 82 presuntos pandilleros muertos, frente a los tres policías o militares que murieron en esos hechos. También hubo 51 presuntos mareros que resultaron lesionados.

Según el análisis que hace el OUDH, los enfrentamientos fueron desproporcionados y se pudieron representar abusos policiales, incluso constitutivos de delito.

“Según los principios de proporcionalidad y mínimo daño, el accionar policial debería ir orientado a la neutralización de la amenaza, dado que los agentes de la PNC estaban mejor equipados que su agresor, bien podrían haber maniobrado para desarmar al particular hasta inmovilizarlo, agotando así los medios disponibles antes de hacer uso de la fuerza letal”, explica el informe.

A forma de ejemplo sobre el uso excesivo de la fuerza letal, explican un enfrentamiento del 10 de noviembre en San Antonio del Mosco, en San Miguel, un supuesto pandillero fue asesinado por agentes policiales, luego que el supuesto marero los atacara con un machete.

De igual forma, establece una relación entre los supuestos pandilleros fallecidos y los agentes de seguridad, en la que afirma que por cada policía o militar muerto, murieron 27 presuntos pandilleros.

En el informe, destacan el aumento de la letalidad policial, pese a que es similar a del 2021, cuando no estaba en vigencia el régimen de excepción, y que se evidencia una respuesta represiva al no ejecutar un accionar de principio de proporcionalidad, necesidad, legalidad y mínimo daño.

“No hacerlo apuntaría a la permanencia de un patrón de uso abusivo de la fuerza que en otros años ha sido encubierto con una narrativa gubernamental que busca legitimar y/o encubrir graves violaciones a los derechos humanos”, afirma el informe.

Concluye que un 12 % del total de muertes ocurridas en el 2022 fueron ocasionadas por el Estado en contextos de enfrentamientos armados.

Antecedente.

En 2017, el comisionado James Cavallaro, de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) explicó que la relación de pandilleros muertos por cada policía (59 en 2016) era “imposible”, en comparación con los resultados de “reales enfrentamientos”.

En ese momento Cavallaro llamó a la reflexión sobre los datos que apuntaban a ejecuciones extrajudiciales. De enero a marzo de 2023, la PNC contabiliza al menos seis enfrentamientos.