El astronauta de ascendencia salvadoreña, Frank Rubio, compartió la clave para realizar sus sueños con más de 200 jóvenes del oriente del país, de la Universidad Gerardo Barrios, de los programas de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID), del programa ¡Supérate!, Oportunidades y Science Girl Camp.

De entrada, Rubio reconoció que su sueño nunca fue ser astronauta, pero cuando la oportunidad se presentó no la dejó pasar. "La clave no es enfocarse en ser astronauta sino que cada día hacer lo mejor en lo que tienes enfrente", reveló Rubio, quien estuvo 371 días en la Estado Espacial Internacional, donde realizó más de 400 experimentos.

"Me da un poco de pena cuando leen mi resumen (hoja de vida), porque suena como que es mucho, pero nunca quise hacer necesariamente todas esas cosas cuando estaba de su edad. Lo que si me gustaba es aprender, me encanta aprender nuevas cosas, puse todo (el empeño) que podía en ser piloto y luego cuando era tiempo de ser doctor, puse todo lo posible para eso y de veras que estaba en el trabajo de mis sueños siendo doctor para las Fuerzas Especiales, pero cuando la oportunidad de ser astronauta se presentó, de veras que no la podía (dejar) pasar", manifestó Rubio a los jóvenes.

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Rubio está de visita en El Salvador para inspirar a los constructores del crecimiento, especialmente aquellos que trabajan en disciplinas de ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas (STEM, para sus siglas en inglés), así como la las instituciones educativas especializadas en estas áreas.


El estadounidense de ascendencia salvadoreña tiene 48 años de edad, tiene una licenciatura en relaciones internacionales de la Academia Militar de los Estados Unidos en West Point, Nueva York, también un doctorado en medicina de la Universidad de Servicios Uniformados de Ciencias de la Salud en Bethesda, Maryland, con una residencia en medicina familiar en el hospital Martin Army Community, en Fort Benning, Georgia, dice la Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio, de Estados Unidos (NASA).

Rubio también es piloto y desde 2017 se incorporó al servicio de la NASA. El 21 de septiembre de 2022 formó parte del equipo que viajó en la nave espacial Soyuz MS-22 hacia la Estación Espacial Internacional para trabajar en la expedición 67, que inicialmente era para seis meses; sin embargo, la nave que los llevó al espacio sufrió una avería y la tripulación extendió su estadía seis meses más en órbita. Rubió rompió el récord de permanencia en el espacio de un astronauta estadounidense, acumulando 371 días.

El astronauta arribó al país el pasado domingo en la tarde acompañado de su madre, la salvadoreña Mirna Argueta. El pasado lunes, Rubio ofreció una conferencia de prensa junto al embajador de Estados Unidos en El Salvador, William Duncan.

Previamente, Rubio estuvo en El Jagüey, Conchagua, en una clínica donde el grupo militar de la embajada de Estados Unidos hacen jornadas médicas.