Centenares de salvadoreños cerraron la madrugada de este sábado en el distrito de Tonacatepeque el festival de la Calabiuza, en el que entre gritos agudos de espanto cobran vida la muerte y personajes de la mitología local.

La lluvia no fue impedimento para que "carretas chillonas" llenas de calaveras, antorchas y otros objetos de espanto, salieran desde el cementerio hasta terminar en la plaza central de Tonacatepeque, 25 km al norte de San Salvador.

Los participantes marchan bajo una intensa lluvia durante el tradicional desfile de
Los participantes marchan bajo una intensa lluvia durante el tradicional desfile de "La Calabiuza", el 1 de noviembre de 2024. /AFP



La "Llorona", el "gritón de la medianoche" y las "Almas en pena", con gritos, alaridos y danzas hicieron sonreír a lugareños y extranjeros.

Llamaron la atención las coreografías y travesuras de esqueletos vivientes y personas mitológicas como la Siguanaba, el Cipitió y el padre sin cabeza, que asustaron a los distraídos.

"Es una emoción muy grande y una experiencia única la que uno vive aquí", declaró a la AFP José Díaz, un empleado de 26 años, quien llegó desde una comunidad rural de Tonacatepeque para participar por primera vez en el evento.

El festival de la Calabiuza tiene lugar la noche del 1 de noviembre de cada año en el día de todos los santos. /AFP
El festival de la Calabiuza tiene lugar la noche del 1 de noviembre de cada año en el día de todos los santos. /AFP



Lo más importante, según Díaz, es "mantener viva" la vieja tradición de décadas.

El festival de la Calabiuza tiene lugar la noche del 1 de noviembre de cada año en el día de todos los santos y es considerado como una alternativa a la importada celebración de Halloween.

Los habitantes de Tonacatepeque, una comunidad de origen indígena, recuerdan a los personajes de la mitología de Cuscatlán, regiones precolombinas del occidente y centro de El Salvador, y a sus familiares muertos./AFP
Los habitantes de Tonacatepeque, una comunidad de origen indígena, recuerdan a los personajes de la mitología de Cuscatlán, regiones precolombinas del occidente y centro de El Salvador, y a sus familiares muertos./AFP



"Lo único malo es la lluvia, pero siempre se disfruta, esto representa el camino de las almas, (en) el día de los muertos", declaró a la AFP Saúl Godoy, de 39 años.

En el parque central de Tonacatepeque hubo reparto de ayote (calabaza) en miel a los participantes del festival que repetían el estribillo: "Angeles somos, del cielo venimos pidiendo ayote para todo el camino, mino, mino".

Los participantes tocan tambores durante el tradicional desfile de
Los participantes tocan tambores durante el tradicional desfile de "La Calabiuza" el 1 de noviembre de 2024, en vísperas del Día de los Muertos en Tonacatepeque. /AFP



La celebración finalizó con una fiesta la madrugada de este sábado y sin incidentes.